Para los que tienen gatos como mascotas, saben que son animales que duermen muchas horas. Si compraste una cama en la tienda de mascotas especial para ellos, puede que no quieran estar en ella y eso puede deberse a varios factores. Te dejamos una serie de consejos para ¿cómo enseñar a un gato a dormir en su cama?
Los gatos son animales que gran parte del día se la pasan durmiendo donde les gusta y en cualquier lugar. Por las noches suelen darse un festín haciendo ruido por toda la casa y esto se debe a que en estado salvaje cazan de noche. No obstante, hay que instaurar algunas reglas de convivencia con ellos.
Los gatos son animales independientes que pasan alrededor de 15 horas al día durmiendo y les gusta descansar en varios lugares, cambian de sitio a cada rato y exploran nuevos materiales y texturas para dormir de forma placentera.
Pueden descansar arriba de muebles, mesas y en las camas de sus dueños, pero si eres de los que prefieren que no lo hagan, revisa algunos factores que los gatos escogen para descansar, como la calidez o la comodidad de su cama, y que se sientan seguros.
¿Cómo enseñar a un gato a dormir en su cama?
Escoge una cama adecuada. Ya sea que la compres o acondiciones una caja de cartón o canasta, busca que sea cómoda.
Selecciona un espacio fijo. De preferencia en lugares elevados, pues eso les hace sentir seguros a los gatos ante el acecho de “depredadores”.
Busca que el tamaño sea amplio. A los gatos les encanta estirarse y debes considerar que la cama no sea un estorbo para que pueda moverse adentro.
Cuida la limpieza. Elige una cama que sea fácil de lavar y con ello evitarás malos olores, que acumulen pelos y bacterias que podrían causar enfermedades.
Verifica materiales. Ya sea de lana o de espuma, que sea suave, abrigada y fresca, considera también el clima. Hay camas térmicas para proteger a los gatos cuando hace frío.
Revisa que no sean materiales translúcidos. Un hábito de gato es esconderse para dormir, así que compra una cama que tenga techo para que no entre luz.
Crea hábitos. Si no te gusta que se suban a las camas, deja la puerta de la habitación cerrada en la noche, y no le abras. Si tu felino insiste, llévalo a su cama, acarícialo y repite esto varios días.
Deja una prenda que huela a ti. A los gatos les gusta frotarse en la ropa de sus dueños. Si dejas una prenda tuya, le hará sentirse más a gusto y seguro.
Deja premios en su cama. Como recompensa para que duerma en su propia cama, déjale premios como un juguete o la golosina que le agrade.
Elogia su comportamiento. Si notas que tu gato se mete por sí solo a su cama, recompénsalo con caricias y elogia su comportamiento.
Evita alimentarlo en demasía por la noche. Dale algo ligero a tu gato, pues si lo alimentas antes de dormir puede que recargue su energía y no te deje dormir.
Juega con él. Unos minutos de juego con tu felino es lo mejor para que tenga un sueño más largo durante la noche, no te olvides de hacerlo a diario.
Lo más importante es que tu gato debe sentirse cómodo y seguro a la hora de usar su cama. Con paciencia y cariño, estos consejos harán que tu felino duerma en cama si se repite esta rutina durante varios días.