El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, pidió manifestaciones en el mundo en contra de la invasión rusa a su país.
“Muestra tu posición. Salgan de las oficinas, de sus casas, de vuestras escuelas y universidades. Sal en nombre de la paz. Sal con símbolos ucranianos para apoyar a Ucrania, para apoyar la libertad, para apoyar la vida. Salgan a sus plazas, a vuestras calles. Háganse visibles y escuchados. Digan que la gente importa. La libertad importa. La paz importa. Ucrania importa”.
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania.
El llamado del mandatario ucraniano se produce un día antes de que se cumpla un mes de la invasión rusa a Ucrania.
En el vídeo, Zelenski insta a los ciudadanos a oponerse a la guerra a partir del 24 de marzo y a pronunciarse en contra del conflicto.
Más temprano en un discurso ante el parlamento japonés pidió reformas profundas en las Naciones Unidas, señalando que sus instancias no impidieron la invasión rusa.
Zelenski llama al mundo a manifestarse por conflicto Rusia-Ucrania
Japón se ha sumado a las fuertes sanciones decretadas por los países occidentales contra Rusia.
“Gracias a los esfuerzos conjuntos, gracias a una presión aún mayor sobre Rusia, lograremos la paz y podremos reconstruir nuestro país. Reformar las instituciones internacionales. Estoy seguro de que Japón estará con nosotros entonces, tal como lo está ahora en nuestra coalición contra la guerra en este momento crucial para todos nosotros”
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania.
Después ante el parlamento francés pidió que las empresas de Francia salgan del mercado ruso.
“Las empresas francesas deben abandonar el mercado ruso. Renault, Auchan, Leroy Merlin y otros. Deben dejar de ser patrocinadores de la maquinaria militar de Rusia, patrocinadores del asesinato de niños y mujeres, patrocinadores de violaciones, robos y saqueos por parte del ejército ruso”.
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania.
El fabricante francés de automóviles Renault anunció luego la suspensión inmediata de las actividades de su fábrica en Moscú, después de que Ucrania llamara a un boicot internacional de la firma por permanecer en Rusia.