Donald Trump, presidente de Estados Unidos, dijo que abandonará la Casa Blanca de Washington D.C. sólo si el Colegio Electoral ratifica la victoria de Joe Biden, político demócrata y virtual ganador de las elecciones del pasado martes 3 de noviembre, aunque Donald Trump advirtió que, pese a ello, podría nunca reconocer su derrota ante el exvicepresidente durante el mandato de Barack Obama.
- Joe Biden ya adelantó que los estadounidenses “no respaldarán” ningún intento por desconocer el veredicto de las urnas.
- El empresario neoyorquino emprendió un esfuerzo mayúsculo político-judicial sin precedentes para cuestionar los resultados de las elecciones, e inició acciones legales carentes de fundamentos que fueron derribadas por tribunales de todo el país.
En un encuentro cercano con periodistas, el primero desde las elecciones, Donald Trump estuvo cerca de admitir que cumpliría su mandato hasta que lo reemplace Joe Biden el 20 de enero.
A Donald Trump se le cuestionó si dejará la Casa Blanca de Washington D.C. en caso de que el Colegio Electoral confirme la victoria de Joe Biden, y respondió:
“Ciertamente lo haré. Y tú lo sabes. Sin embargo, si lo hacen (nombrar ganador a Joe Biden), cometerían un error. Va a ser muy difícil conceder la victoria de Joe Biden (porque) fue un fraude (electoral) masivo. La infraestructura electoral de Estados Unidos es como la de un país del tercer mundo”.
Trump cede poco a poco
Se trata de lo más cercano que ha estado Donald Trump de admitir su derrota ante Joe Biden, incluso mientras repetía sus afirmaciones de fraude electoral masivo.
No obstante, Donald Trump dijo que sería difícil para él ceder en las circunstancias actuales y se negó a decir si asistiría a la toma de posesión de Joe Biden, que sería el próximo miércoles 20 de enero.
- Joe Biden acumuló 306 votos del Colegio Electoral tras las elecciones del 3 de noviembre.
- Para ganar, se necesitan al menos 270 votos del Colegio Electoral.
- En tanto, Donald Trump obtuvo un total de 232 votos en dicho órgano comicial.
En Estados Unidos, un candidato se convierte en presidente al obtener la mayor cantidad de votos electorales en lugar de ganar la mayoría del voto popular nacional. Los electores, asignados a los 50 estados y al Distrito de Columbia (Washington D.C., la capital), en gran parte en función de su población, son leales al partido y se comprometen a apoyar al candidato que ganó el voto popular en su estado.
