Los casos diarios de COVID-19 en la ciudad anfitriona de los Juegos Olímpicos, Tokio, alcanzaron un récord por segundo día consecutivo, superando los 3 mil por primera vez desde el comienzo de la pandemia, según informaron medios de comunicación locales, mientras el aumento de las infecciones ejerce presión sobre los hospitales.
El fuerte aumento de los casos puede frenar el entusiasmo nacional por los Juegos —que se celebran en condiciones sin precedentes, incluida la prohibición de entrada de espectadores en la mayoría de las sedes—, a pesar de que los atletas japoneses están consiguiendo un número elevado de medallas.
El aumento también puede suponer un problema para el primer ministro japonés, Yoshihide Suga, cuya valoración en los sondeos de opinión está en su punto más bajo desde que asumió el cargo en septiembre pasado, antes de las elecciones generales de este año.
Los gobernadores de tres prefecturas cercanas a Tokio pedirán al Gobierno que declare el Estado de emergencia en sus regiones, según un ministro del gabinete, después de que los casos diarios alcanzaran los 2 mil 848 el martes.
Yasutoshi Nishimura, que dirige la respuesta japonesa al COVID-19, dijo a un grupo parlamentario que las prefecturas pedirán al Gobierno que declare la emergencia ya el jueves.
Nishimura añadió que se espera que los casos diarios de COVID-19 sigan aumentando en los próximos días, ya que es posible que las pruebas diagnósticas se hayan retrasado durante las vacaciones de la semana pasada.
“Creo que hemos entrado en un modo de aumento brusco de los casos, que era lo que más temía”, dijo a los periodistas Yuji Kuroiwa, gobernador de la prefectura de Kanagawa, cerca de Tokio. En Kanagawa y en las cercanas prefecturas de Chiba y Saitama están aumentando los casos.
Tokio se encuentra bajo su cuarto estado de emergencia, que abarcará todos los Juegos Olímpicos, mientras que las otras tres regiones están aplicando medidas de “cuasiemergencia” más laxas.
Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Tokio informaron el miércoles de 16 nuevos casos de COVID-19 relacionados con los Juegos, alcanzando un total de 169 desde el 1 de julio. Los atletas olímpicos, el personal que trabaja en la competición y los medios de comunicación deben seguir unas normas estrictas para evitar la propagación del virus, que incluyen la realización de pruebas frecuentes.
