Joe Biden, presidente de Estados Unidos, revocó este miércoles las órdenes ejecutivas de su predecesor Donald Trump que buscaban prohibir las aplicaciones móviles de propiedad china TikTok y WeChat por preocupaciones de seguridad nacional, dijo la Casa Blanca.
Una declaración de la Casa Blanca afirmó que en lugar de prohibir las populares aplicaciones, la administración Biden realizará “un análisis riguroso basado en evidencia para abordar los riesgos” de las aplicaciones de Internet controladas por entidades extranjeras.
Trump había dicho que las aplicaciones de propiedad china planteaban riesgos para la seguridad nacional y había intentado forzar la venta de TikTok a inversores estadounidenses.
“La orden de Biden pretende identificar cualquier aplicación de software conectada que pueda suponer un riesgo inaceptable para la seguridad nacional de Estados Unidos y el pueblo estadounidense”, dijo la Casa Blanca.
“Esto, incluyendo aplicaciones que sean propiedad, estén controladas o sean gestionadas por personas que apoyen actividades militares o de inteligencia de adversarios extranjeros, o que estén implicadas en actividades cibernéticas maliciosas, o que impliquen aplicaciones que recojan datos personales sensibles”, agregó.
Se protegerán datos personales sensibles en TikTok y WeChat
La nueva orden ejecutiva pide al Departamento de Comercio y a otras agencias federales que desarrollen directrices “para proteger los datos personales sensibles, incluyendo la información de identificación personal y la información genética” del mal uso.
Se cree que TikTok, propiedad de la empresa china ByteDance, tiene unos mil millones de usuarios en todo el mundo, incluidos más de 100 millones en Estados Unidos, y es especialmente popular entre los usuarios jóvenes de teléfonos inteligentes.
WeChat, que forma parte del gigante tecnológico chino Tencent, es una “superaplicación” muy popular que incluye redes sociales, mensajería, comercio electrónico y mucho más.
Tanto TikTok, que tiene más de 100 millones de usuarios en Estados Unidos, como WeChat han negado la acusación de que planteen problemas de seguridad nacional.