Donald Trump, presidente de Estados Unidos, no debería visitar Kenosha, Wisconsin, ciudad donde emergieron fuertes protestas antirracistas la semana pasada luego de que Jacob Blake, ciudadano afroamericano, recibió un disparo de un oficial de policía blanco que lo dejó parcialmente paralizado, informó este domingo Mandela Barnes, vicegobernador del Partido Demócrata en esa entidad.
El presidente Donald Trump, quien tomó posición severa ante las protestas antirracistas y contra la violencia policial en el país, visitará Wisconsin el próximo martes 1 de septiembre, dijo la Casa Blanca de Washington D.C. la tarde del sábado pasado, generando preocupaciones entre los miembros del Partido Demócrata, que dicen que esto podría agudizar la confrontación entre ciudadanos y fuerzas del orden.
Mandela Barnes dijo en una entrevista otorgada a la cadena Cable News Network (CNN):
“Ellos han centrado la totalidad de su convención creando más animosidad y más divisiones sobre lo que está sucediendo en Kenosha. Así que no sé cómo, en vista de tantas declaraciones que el presidente ha hecho, ahora pretende venir a ofrecer ayuda y de ninguna manera necesitamos eso en este momento”.
Los disparos del 22 de agosto contra Jabob Blake, que ocurrieron delante de sus tres hijos, convirtieron a la ciudad de Kenosha, Wisconsin, de población mayoritariamente blanca, en el nuevo foco de las manifestaciones antirracistas y contra el abuso policial en Estados Unidos. Detractores acusan a Trump de intentar exacerbar la violencia con su retórica incendiaria.
Con información de Reuters
Te puede interesar:
Protestan en Washington por racismo y abuso policial; ve imágenes
Miles de ciudadanos en Washington D.C. salieron a protestar en contra del racismo y la violencia policial en Estados Unidos.
En NBA, jugadores “se dan el lujo” de protestar contra racismo: Jared Kushner
Jared Kushner, yerno de Donald Trump y asesor de la Casa Blanca, dijo que jugadores de la NBA “se dan el lujo” de protestar contra el racismo.
Pilotos de la Fórmula 1 se arrodillan para luchar contra el racismo
Lewis Hamilton y otros pilotos de la Fórmula 1 se arrodillaron al inicio de la primera carrera del año en contra del racismo.