El Senado de Estados Unidos dio este viernes un duro golpe al presidente Donald Trump en sus últimas semanas al frente de la Casa Blanca de Washington D.C., al votar en favor de eliminar el veto al presupuesto de Defensa: es la primera ocasión en que los legisladores, incluyendo a una gran parte republicana, revierten uno de los vetos de Donald Trump.
Con más de 80 de los 100 legisladores del Senado votando para eliminar el veto de Donald Trump, muchos más de los dos tercios requeridos, la cámara legislativa controlada por los republicanos aprobó la ley de presupuesto de Defensa por 740 mil 500 millones de dólares para el año fiscal 2021. La Cámara de Representantes, bajo control de demócratas, ya había votado a favor de revertir el veto con 322 en pro y 87 en contra.
Senado da la espalda a Donald Trump
En una rara sesión del día de Año Nuevo, el Senado da la espalda a 20 días de que Donald Trump abandone la Casa Blanca, contrastando con el fiel apoyo que Donald Trump recibió durante cuatro años. Desde que perdió la reelección, el presidente critica a los republicanos del Senado por no respaldar sus afirmaciones de fraude electoral y por rechazar la aprobación de cheques de ayuda COVID-19 mayores.
- La Ley de Autorización de Defensa Nacional dará un presupuesto de 740 mil 500 millones de dólares.
Donald Trump, quien regresó a Washington D.C. el jueves desde su club privado en Florida, aumentó la presión sobre los republicanos y criticó a líderes del partido por no cumplir con sus órdenes sobre las dos medidas: “El ‘liderazgo’ republicano débil y cansado permitirá que se apruebe la mala Ley de Defensa. A menos que los republicanos tengan un deseo de muerte”, deberían apoyar el veto al presupuesto.
Las tensiones republicanas aumentan por el plan de algunos miembros conservadores de objetar los votos del Colegio Electoral que certifiquen la victoria presidencial del demócrata Joe Biden antes de que preste juramento el 20 de enero. Los líderes republicanos ya reconocieron públicamente la derrota de Donald Trump, por lo que el Partido Republicano parece estar fragmentándose en el Senado.