Riccardo Ceccobelli, sacerdote de la diócesis de Todi, ciudad y municipio de la provincia de Perugia, en el centro de Italia, sorprendió a los fieles que asistieron a su misa al anunciar que se había enamorado, por lo que está dispuesto a colgar la sotana para permanecer con su nuevo amor en un estado de vida laico.
El sacerdote Riccardo Ceccobelli explicó a su superior, el obispo Gualtiero Sigismondi, según un comunicado de prensa de la diócesis en Italia:
“Mi corazón se enamoró, nunca he tenido la posibilidad de traicionar las promesas que hice. Pero quiero intentar vivir este amor”.
Revolución amorosa
Riccardo Ceccobelli relató su historia el martes al diario Corriere della Sera: fue suspendido del servicio e inició los trámites para volver al estado laico en Italia, según la misma fuente; ante la declaración de Ceccobelli, el obispo Gualtiero Sigismondi envió un mensaje de despedida para el nuevo enamorado:
“Agradezco al sacerdote Riccardo Ceccobelli todo el servicio prestado hasta ahora. Y en primer lugar, le envío mis más sinceros deseos para que esa decisión, tomada en plena libertad como él mismo me dijo, le garantice la paz y la serenidad”.
Obispo Gualtiero Sigismondi de Italia.
El sacerdote Riccardo Ceccobelli confesó que la decisión fue difícil porque ama y respeta a la Iglesia en Italia: “No logro ser coherente, transparente y correcto como lo he sido hasta ahora”, confesó. Esta “confesión”, en público, frente a su rebaño y a su obispo, la hizo durante la misa dominical, dejando sorprendidos a todos.
- Según Corriere della Sera, “todo el mundo sabía” que Riccardo Ceccobelli estaba enamorado de una mujer de la localidad
- La identidad de la mujer que le robó el corazón y por la que el enamorado colgó la sotana no ha sido divulgada por los medios