Resultado de una reforma tributaria que afectaría a la clase económica media y baja, ciudadanos de Colombia llevan siete días protagonizando manifestaciones que han sido reprimidas por la Policía y el Ejército: se habla de al menos 20 muertos y 846 heridos.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y Estados Unidos denunciaron un uso más que desproporcionado de la fuerza por parte de la Policía de Colombia para controlar manifestaciones contra el Gobierno del presidente Iván Duque Márquez.
- La reforma tributaria ya fue retirada para ser reorganizada
- Cálculos apuntan a que hay 89 personas desaparecidas y 846 heridas
El diputado español Manu Pineda envió una carta al jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, para solicitarle el envío inmediato de una misión de observación a Colombia, a fin de dar cuenta de manifestaciones reprimidas incluso con la muerte de jóvenes ciudadanos en varias ciudades del país.
Las manifestaciones se convirtieron en un grito contra la pobreza. La Policía Nacional anunció que investiga más de dos docenas de denuncias de brutalidad, mientras que el ministro de Defensa, Diego Molano, acusó a grupos armados ilegales de estar infiltrados en las protestas para causar violencia.
“Estamos profundamente alarmados por los acontecimientos ocurridos en la ciudad de Cali (…) la pasada noche, cuando la Policía abrió fuego contra los manifestantes que protestaban contra la reforma tributaria, matando e hiriendo a varias personas, según la información recibida”.
Marta Hurtado, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Aunque Iván Duque retiró el proyecto e insistió en que sigue siendo necesaria la reforma para mantener los programas de asistencia social y garantizar la estabilidad fiscal, las manifestaciones continuaron en Bogotá, Medellín y Cali, mientras que en otras zonas del país se produjeron bloqueos de carreteras.
Se suspende el deporte
Tres partidos que debían jugarse esta semana en Colombia por las copas Libertadores y Sudamericana fueron trasladados a Paraguay, en medio de las manifestaciones que se registran, informó el martes la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol). Con esto, la crisis económica sigue ahondándose.