Protestas Guatemala siguen por pidiendo renuncia del presidente: cientos de personas volvieron a manifestarse este domingo para reclamar la dimisión del conservador Alejandro Giammattei, a quien le reprochan no destinar suficientes recursos a combatir la pobreza y la desigualdad en su nuevo presupuesto.
“Prefiero morir como rebelde que vivir como esclavo” y “Fuera Giammattei” se leía en las pancartas de algunos de los manifestantes que llegaron con mascarillas a la plaza central, frente a la antigua sede del gobierno, ubicada en el centro histórico de la capital.
Las protestas del domingo transcurrían de forma pacífica, un día después de que un grupo de guatemaltecos quemara la sede del Congreso en protesta por la aprobación de un presupuesto que no contempla aumentos en las partidas sociales y prevé un fuerte endeudamiento público en Guatemala.
El mandatario emitió el domingo por la tarde un comunicado en el que reprochó las manifestaciones violentas al considerar que son grupos “minoritarios que buscan forzar un verdadero golpe de Estado”, y anunció que su gobierno ha invocado la Carta Democrática Interamericana de la OEA, un instrumento del organismo supranacional con capacidad para sancionar o tomar las medidas adecuadas para garantizar el respeto del orden constitucional de los países.
¿Qué dice Giammattei sobre las protestas en Guatemala?
Giammattei abogó en el comunicado por hablar con distintos sectores para analizar la situación, ya que “no es sino a través del diálogo y la concentración, que nuestro país podrá superar los desafíos que hoy confronta”.
La Universidad de San Carlos, la única estatal del país, hizo un llamado para convocar un paro nacional el lunes y el Comité de Desarrollo Campesino (Codeca) anunció que ese día bloqueará carreteras importantes del país.
El vicepresidente del país, Guillermo Castillo, que el viernes ofreció a Giammattei dimitir juntos “por el bien del país”, pidió este domingo al Ministerio Público (MP, fiscalía) que investigue la quema de oficinas del Congreso pero también la represión policial.
Si llegaran a renunciar ambos gobernantes, el Congreso tendría que juramentar al canciller, Pedro Brolo.
El secretario general OEA, Luis Almagro, y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos criticaron el presupuesto y la violencia contra los manifestantes, tras condenar los incidentes del Congreso.
El presupuesto aumentó, pero no beneficiará a la población
El Congreso, en su mayoría integrado por el oficialismo y partidos afines, aprobó esta semana un presupuesto para 2021 de casi 12,800 millones de dólares, un 25% más abultado que el de este año.
La mayoría de los fondos están dirigidos a infraestructuras con el sector privado y no prevé aumentos en las partidas de salud ni de educación, ni tampoco en las destinadas a combatir la pobreza y la desnutrición infantil.
El 59.3% de la población vive en la pobreza y la desnutrición infantil afecta a casi el 50% de los niños menores de cinco años.