Las manifestaciones ciudadanas en Colombia lograron que el Senado de la República archivara este miércoles la reforma a la salud: la primera reforma en caer fue la tributaria, y dos ministros federales ya han renunciado al Gobierno del presidente Iván Duque Márquez.
Los manifestantes ampliaron sus demandas para exigir una renta básica para familias pobres, fin de la violencia policial, empleo, salud y educación para jóvenes en Colombia. La Cámara de Representantes y el Senado dijeron que la reforma será reanalizada, para incluir a todos los sectores nacionales.
Colombia exige salud
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Las cifras de muertos reportadas por grupos civiles y el Gobierno de Colombia no coinciden. La Fiscalía General de la Nación (FGN) informó a comienzos de esta semana que, de los 42 reportes de personas fallecidas en las manifestaciones, se identificó que sólo 15 tienen relación directa.
El archivo a la reforma de salud ocurre tras una escalada de desigualdad y pobreza en Colombia, intensificada por la pandemia del COVID-19, que provocó quiebra de empresas, repunte del desempleo y endeudamiento público para enfrentar la crisis económica que golpea más a los jóvenes.
Analistas vaticinan que la interrupción de la actividad productiva por manifestaciones enfriará el dinamismo de la cuarta economía de América Latina, tras lograr sorpresiva expansión de 1.1% en el primer trimestre, apenas saliendo de las dificultades tras una histórica contracción del 6.8% en 2020.
El Comité Nacional de Paro en Colombia, integrado por los principales sindicatos, grupos de estudiantes y otras organizaciones, tiene previsto reunirse el jueves con el Gobierno en búsqueda de un acuerdo que permita levantar las protestas, y esperar una reconversión a la reforma de salud.
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