La policía de Texas tuvo “fallos críticos” que tardó en intervenir ante un tiroteo en un colegio en 2022, en la masacre donde murieron 19 niños y dos profesores, identificó el Departamento de Justicia de Estados Unidos en un informe.
¿Qué dice el informe sobre la masacre escolar en Texas?
De acuerdo con el informe, se “identificaron varios fallos críticos”, y destaca que el “más significativo fue que los oficiales que respondieron deberían haber reconocido inmediatamente que se trataba de un caso de tirador activo”.
La respuesta a la matanza en Texas del 24 de mayo de 2022 en la escuela primaria Robb “fue un fracaso”, concluye el documento de más de 550 páginas.
[Te puede interesar: Tres publicaciones en Facebook, 30 minutos antes de la masacre: así anunció ataque]
“Las dolorosas lecciones detalladas en este informe no pretenden exacerbar una situación ya trágica”, destaca el informe del Departamento de Justicia estadounidense.
Así fue la respuesta de la policía de Texas ante masacre escolar
Se sabe que los agentes esperaron más de una hora en el exterior de las aulas donde se produjo el tiroteo y no hicieron nada mientras los niños yacían muertos o agonizando en el interior, por lo que la policía de Uvalde ha estado bajo la lupa.
Los 19 agentes presentes en el lugar esperaban el asalto de una unidad especializada, a pesar de que las autoridades recibieron numerosas llamadas de personas que se encontraban en el interior de las aulas, incluida la de un niño que suplicaba: “Por favor, envíen a la policía ahora”.
[Te puede interesar: “El niño más dulce”: ellos son las víctimas del tiroteo en escuela de Texas]
El informe denuncia una “cascada de fallos de mando, de toma de decisiones, de táctica, de política y de entrenamiento que contribuyeron a estos fracasos y fallos”.
“El tirador fue muerto aproximadamente 77 minutos después de la llegada de los primeros policías”, subrayan los autores del informe, elaborado a partir de 260 entrevistas y nueve visitas, según el documento.
Los tiroteos escolares se han convertido en algo habitual en un país donde alrededor de un tercio de los adultos posee un arma de fuego y las regulaciones para la compra incluso de rifles potentes son laxas.