Los mortíferos combates entre Azerbaiyán y Armenia, que este domingo sacudieron la región del Cáucaso, han puesto bajo los reflectores a dos exrepúblicas soviéticas poco conocidas entre los occidentales. Las cartas de presentación de Armenia ante el mundo son personalidades destacadas de su diáspora, entre ellas la socialité Kim Kardashian y la actriz y cantante Cher; mientras que Azerbaiyán se planta frente al orbe con su potencial petrolero.
Los enfrentamientos armados de este domingo, han dejado hasta el momento al menos 39 muertos.
El petroleo de Azerbaiyán
Azerbaiyán, gracias a sus ingresos derivados del petróleo, emprendió en los últimos años una campaña para darse a conocer en todo el mundo, sobre todo en Occidente, más allá de su reputación de autoritarismo y nepotismo.
Así, Bakú (capital de Azerbaiyán) invirtió en misiones de patrocinio, como en la Eurocopa 2020 de fútbol, aplazada a causa de la pandemia de coronavirus. Azerbaiyán acogerá algunos encuentros de esta competición. Además, en el país también se celebra un Gran Premio de Fórmula 1.
Asimismo, Bakú intenta imponerse en Europa como una alternativa a los hidrocarburos rusos.
Kim Kardashian y Cher. La diáspora de Armenia
Armenia, por su parte, cuenta con la carta de su amplia e influyente diáspora, herederos de los refugiados de la represión otomana.
La estrella mundial de la telerrealidad Kim Kardashian, el cantante Charles Aznavour o la cantante y actriz Cher, por ejemplo, tienen en común sus orígenes armenios.
Algunos asumieron el papel de embajadores oficiosos de Ereván (capital de Armenia), como Kim Kardashian sobre el genocidio, o Charles Aznavour, que recaudó fondos para ayudar a Armenia tras el devastador sismo de 1988.
Democratización de Armenia contra dinastía de Azerbaiyán
Armenia, un país cristiano desde el siglo IV, ha tenido una historia turbulenta desde su independencia, en 1991. Este Estado empobrecido y enclavado ha sido escenario de varias revueltas, represiones violentas y elecciones controvertidas en un contexto de clientelismo y autoritarismo por parte de los diferentes mandatarios que se han sucedido en el poder.
En la primavera de 2018, una revolución pacífica llevó al poder al actual primer ministro, Nikol Pashinyan. Este último ordenó reformas bastante populares para democratizar las instituciones y atajar la corrupción.
Azerbaiyán, una tierra chiita a orillas del mar Caspio, está gobernada por una misma familia desde 1993. Heydar Aliev, un exgeneral del KGB soviético, dirigió el país con puño de hierro hasta octubre de 2003, y le pasó el poder a su hijo, Ilham, unas semanas antes de morir.
Como su padre, Ilham Aliev no ha dejado que emerja ninguna oposición. En 2017, nombró a su esposa Mehriban vicepresidenta primera del país.
El histórico odio entre Azerbaiyán y Armenia
Azerbaiyán y Armenia, dos países ubicados en el Cáucaso, se profesan un odio tenaz desde hace décadas a raíz de un conflicto territorial, que desde el pasado domingo se ha materializado en mortíferos combates.
Rusia, Turquía y genocidio en Armenia
Turquía, que tiene ambiciones geoestratégicas en el Cáucaso y en la Asia central exsoviética, ha hecho de Azerbaiyán, un país de habla turca rico en hidrocarburos, su principal aliado en la región, una amistad alentada por su aversión por Armenia. Apoya a Bakú en su voluntad de recuperar la región Nagorno Kabaraj.
Los armenios también albergan una cierta hostilidad hacia Turquía a causa del genocidio de cerca de 1,5 millones de compatriotas suyos por parte del Imperio Otomano durante la Primera Guerra Mundial. Turquía rechaza ese término y califica el suceso de masacres recíprocas.
Con todo, la gran potencia regional continúa siendo Rusia, que tiene unas relaciones más estrechas con Armenia que con Azerbaiyán, aunque vende armas a ambos países.
Ereván ha participado en alianzas políticas, económicas y militares dominadas por Moscú, como la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC).
Además, Armenia necesita a Rusia más que Azerbaiyán, pues este último es un país más rico, y ha aumentado su gasto militar.
Nagorno Karabaj, la manzana de la discordia entre Azerbaiyán y Armenia
En el corazón de las relaciones tóxicas entre Armenia y Azerbaiyán está la región de Nagorno Kabaraj.
El enclave, de mayoría armenia y anexionado en 1921 a Azerbaiyán por las autoridades soviéticas, proclamó unilateralmente su independencia en 1991 con el apoyo de Armenia.
A esto le siguió una guerra que dejó 30 mil muertos y centenares de miles de refugiados. A pesar del alto el fuego firmado en 1994 y de una mediación obrada por Rusia, Estados Unidos y Francia que conformaron el llamado Grupo de Minsk, los choques armados en la zona continuaron siendo frecuentes.
Antes de los combates del domingo, los enfrentamientos recientes más importantes ocurrieron en abril de 2016 y dejaron unos 110 muertos.