Las autoridades peruanas confiaban el domingo en que las violentas protestas tras la destitución del presidente Pedro Castillo comiencen a ceder, en tanto el Papa Francisco llamaba al diálogo y Estados Unidos a emprender reformas para salvaguardar la democracia.
“Están funcionando las medidas que hemos tomado, se están recuperando carreteras, se están habilitando aeropuertos y también está disminuyendo la violencia de las personas que se manifestaban en la calle“, dijo el domingo el primer ministro, Pedro Angulo, a la televisora estatal TV Perú.
Las protestas más intensas en el sur andino, región golpeada por la pobreza, exigen la libertad de Castillo, preso e investigado por rebelión, tras su fallido intento de golpe de Estado.
También exigen la renuncia de su sucesora, Dina Boluarte, el cierre del Parlamento y elecciones generales inmediatas.
Boluarte ya adelantó que se mantendrá firme en el cargo y exigió al Congreso que acelere la aprobación de un adelanto de las elecciones generales, una demanda que respaldan el 83% de los ciudadanos que podría atenuar la crisis.
El Parlamento debe volver a someter a votación este martes 20 de diciembre el proyecto para adelantar los comicios de 2026 a 2023, que la semana pasada no logró los votos necesarios.
El conflicto se da porque un sector del Congreso, sobre todo el que apoya a Castillo, quiere que se incluya el llamado a una Asamblea Constituyente que elabore una nueva Carta Magna que sustituya la de 1993, una posibilidad que no logra consenso.
Manifestaciones en Perú por destitución de presidente
Las manifestaciones estallaron luego de que Castillo, un maestro rural de izquierda y de origen humilde, fuera destituido por el parlamento.
El 7 de diciembre, antes de ser sometido a un nuevo juicio político y destituido, Castillo intentó cerrar el Parlamento, intervenir los poderes públicos y gobernar por decreto.
Pedro Castillo justificó su decisión en una obstrucción desde el Congreso para gobernar, además de ser tratado con racismo.
No consiguió respaldo institucional y fue detenido cuando intentaba llegar a la embajada de México para asilarse.
La justicia decidió colocarlo en prisión preventiva hasta junio de 2024, para ser investigado por rebelión.
Fallecidos por manifestaciones
La represión de las manifestaciones en Perú dejó por el momento 20 muertos, según el último informe de la Defensoría del Pueblo.
Se contabilizan 646 heridos, de los cuales 356 son civiles y 290 son policías, en choques entre manifestantes y fuerzas de seguridad.
Este domingo aún se registraron algunos enfrentamientos en el noroeste del país.
“Instamos a las instituciones democráticas de Perú a realizar las reformas necesarias durante este momento difícil“, dijo este domingo en Twitter el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, sobre una conversación que sostuvo el viernes con Boluarte.
Blinken afirmó que Washington continuará apoyando a la presidencia peruana.
En tanto, en su Angelus del domingo, el Papa Francisco oró por Perú para que “cese la violencia” y “se emprenda el camino del diálogo para superar la crisis política y social”.
Boluarte, quien lleva 11 días en el cargo, anunció la noche del domingo en el programa de TV Cuarto Poder que el martes hará cambios en su gabinete, entre ellos el primer ministro, y privilegiará la experiencia política antes que la técnica para enfrentar mejor la crisis.
Este domingo, representantes de la Defensoría peruana coordinaron en Aguaytia, Ucayali, con autoridades para promover el diálogo con manifestantes, donde enfrentamientos dejaron 5 civiles y 6 policías heridos.
En algunos casos, como en Ayacucho, las muertes del último viernes fueron producto de enfrentamientos con militares, autorizados a controlar la seguridad interna en el marco de un estado de emergencia.
En aquella ocasión, la Defensoría pidió una investigación penal, debido a los reportes de disparos directos al cuerpo por parte de militares. Entre las víctimas hubo menores de edad.
Sin embargo, este domingo, la presidenta de Perú, Boluarte dijo que, si bien “la Fiscalía ha intervenido”, también conversó con el jefe de las Fuerzas Armadas para que estos casos se investiguen en el fuero militar.
El sábado, deudos de algunos de los fallecidos en Ayacucho, llevaron los ataúdes de sus familiares en procesión, pidiendo sanción para los responsables.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos dijo el domingo que “reconoce la apertura para la construcción de canales de diálogo como vía para atender la conflictividad social” y anunció una visita a Perú el martes y miércoles.
Recuperación de carreteras y unidades aeroportuarias en Perú
Las manifestaciones produjeron a inicios de la semana pasada el cierre de un centenar de vías y de varios aeropuertos, en algunos casos con destrozos por vandalismo.
Sin embargo, desde el viernes, estas se han ido despejando tras la intervención de policías y militares.
“Creo que estamos en buen camino, como señaló ya la presidenta, las medidas que se han tomado están ayudando a reducir la conflictividad”, dijo el ministro de Economía, Alex Contreras, a Radio RPP.
Explicó que varios ministros han viajado hacia las zonas en conflicto “para fomentar el diálogo y llegar a consensos”.
La ministra de Transporte, Paola Lazarte, contó que las operaciones aeroportuarias se reanudarán el lunes en Juliaca y el martes en Ayacucho.
El viernes, reabrió el aeropuerto del Cusco. Esta semana debería ocurrir lo propio con el de Arequipa. La ciudadela inca Machu Picchu, en el Cusco, desde donde fueron evacuados el sábado 200 turistas que quedaron varados por el cierre de vías, permanecía cerrada desde la semana pasada “hasta nuevo aviso”, informó el Ministerio de Cultura.