En una clara advertencia hacia Rusia y Corea del Norte, el Pentágono apuntó que sus armas nucleares están destinadas a disuadir “todas las formas de ataque estratégico”, incluidos aquellos que involucran armas convencionales.
Asimismo, al presentar la Estrategia de Seguridad Nacional 2022 el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin precisó que actualmente se considera a Rusia “amenaza aguda”, mientras China es la única competencia de su país, pues intenta cambiar el orden internacional a la vez que tiene el poder para hacerlo.
¿Qué plantea la estrategia de defensa del Pentágono?
En una clara advertencia a Rusia y Corea del Norte, el Pentágono afirmó este jueves que las armas nucleares están destinadas a disuadir “todas las formas de ataque estratégico”, incluidos los que involucran armas convencionales.
“Esto incluye el empleo nuclear a cualquier escala, e incluye ataques de alto impacto de naturaleza estratégica que utilizan medios no nucleares”, afirmó Lloyd Austin en conferencia de prensa al presentar la publicación de la estrategia estadounidense para los próximos años.
Añadió que este nuevo enfoque pretende “complicar la toma de decisiones” del adversario, en momentos en que Rusia acusa a Ucrania de prepararse para utilizar una bomba “sucia”.
“Rusia llevó a cabo su agresión contra Ucrania bajo amenaza nuclear, con declaraciones irresponsables, ejercicios nucleares en fechas irregulares y mentiras sobre el potencial uso de armas de destrucción masiva”, especifica el documento, difundido por primera vez junto a la nueva estrategia de defensa estadounidense.
En tanto que, mientras Estados Unidos prevé que Corea del Norte realice una prueba nuclear, el Pentágono desestimó exhibiciones armamentistas y aseguró que un ataque nuclear del país asiático solo significaría el fin del régimen de Kim Jong Un, al no contar con el poder para sobrellevar un enfrentamiento de esa escala.
“Cualquier ataque nuclear de Corea del Norte contra Estados Unidos o sus aliados y socios es inaceptable y conduciría al fin de ese régimen. No hay escenario en el que el régimen de Kim pueda emplear armas nucleares y sobrevivir”, advierte el ministerio de Defensa estadounidense en ese documento.
En tanto que apuntó que China se esfuerza por ampliar, modernizar y diversificar sus fuerzas nucleares, por lo que Pekín “probablemente quiera poseer al menos mil ojivas nucleares para finales de la década”.
Pero “Rusia es el principal rival de Estados Unidos con las fuerzas nucleares más diversas”, precisa, con mil 550 ojivas nucleares desplegadas y 2 mil sin desplegar.
“Su moderno arsenal nuclear, que se espera que crezca, representa una amenaza existencial a largo plazo para Estados Unidos y nuestros aliados y socios”, agregó el departamento de Defensa, que hace hincapié en que “en la década de 2030, Estados Unidos se verá, por primera vez en su historia, confrontado a dos grandes potencias nucleares (que serán) rivales estratégicas y adversarios potenciales”.
¿En qué se enfocará el Pentágono?
En la conferencia de prensa, así como en el documento desclasificado, el Departamento de Defensa subrayó que Rusia representa una “amenaza aguda” para Estados Unidos, aunque China es su desafío “más trascendental” en cuestión de seguridad en las próximas décadas.
China “representa el desafío más trascendental y sistémico, mientras que Rusia plantea una amenaza aguda, tanto para los intereses nacionales vitales de Estados Unidos en el extranjero como en el territorio estadounidense”, precisa el documento estadounidense que fija la estrategia del ejército para los próximos años.
“El desafío más profundo y grave para la seguridad nacional de Estados Unidos es el esfuerzo coercitivo y cada vez más agresivo (de China) para remodelar la región del Indo-Pacífico y el sistema internacional para adaptarlo a sus intereses y preferencias autoritarias”, señala esta nueva estrategia publicada por primera vez junto con la nueva estrategia nuclear de Estados Unidos.
Agrega que la retórica china contra Taiwán, cuya soberanía reclama y promete retomar por la fuerza si es necesario, es un factor “desestabilizador” que corre el riesgo de cometer un error de cálculo y amenaza la paz en la zona.
Ante ello, a futuro el gobierno estadounidense afirmó que se buscará “evitar el dominio de China en regiones clave al tiempo que protege el territorio estadounidense y fortalece un sistema internacional estable y abierto”, a la vez que subraya que “un conflicto con China no es ni inevitable ni deseable”.