Noruega levantó el sábado las últimas restricciones para frenar el COVID-19, suprimiendo las consignas de distanciamiento social y el uso de cubrebocas en espacios muy concurridos, pese al aumento de los contagios por la variante Ómicron.
“El metro de distanciamiento está desapareciendo. Vamos a suprimir la recomendación sobre el distanciamiento social”.
Jonas Gahr Store, primer ministro
“Ahora podemos tener interacciones sociales como antes” y mencionó el ocio nocturno, los eventos culturales y el desplazamiento al trabajo en buses, trenes y ferris.
Noruega ya había levantado la mayor parte de las restricciones por la pandemia como el teletrabajo o la limitación de los aforos.
A partir de ahora, ya no será obligatorio aislarse cuatro días después de dar positivo al COVID -esta medida será únicamente una recomendación-, y ya no será necesario hacer un test a los niños que tengan síntomas respiratorios.
Desde el inicio de la pandemia, Noruega registró 986 mil 851 casos de COVID y mil 440 muertes ligadas al coronavirus.