Continúan las protestas en Wisconsin tras agresión policiaca a Jacob Blake

La noche de este lunes continuaron las protestas en Wisconsin, luego de que un policía disparara hasta en siete ocasiones y por la espalda al ciudadano afroamericano, Jacob Blake.

Habitantes de la ciudad estadounidense de Kenosha, Wisconsin, salieron a las calles por segunda noche consecutiva, para protestar en contra del ataque policiaco hacia un ciudadano afroamericano y que lo mantiene en estado crítico.

Al grito de “sin justicia no hay paz”, cientos de manifestantes expresaron su indignación y pidieron justicia para Jacob Blake.

Los gritos, protestas y disturbios se han escuchado desde hace dos días y ha forzado a desplegar a la guardia nacional.

Policía trató de repeler a los manifestantes

La policía lanzó gases lacrimógenos contra cientos de manifestantes la noche del lunes, al mismo tiempo, la ira crece a lo largo de Estados Unidos después de que un hombre afroamericano fuera baleado por un oficial de policía, un caso que reaviva las históricas protestas contra el racismo tras la muerte de George Floyd.

Esta es la segunda noche de enfrentamientos en la ciudad de Kenosha, sureste de Wisconsin, después de que el domingo se hiciera público un video en el que se ve cómo un policía dispara por la espalda varias veces a Jacob Blake, de 29 años, ante la mirada de sus tres hijos. 

Poco después de que entrara en vigor el toque de queda fijado entre las 8:00 p.m., hora local, del lunes, agentes de la policía local equipados con trajes antidisturbios usaron gases lacrimógenos contra los manifestantes.

Los policías respondían al lanzamiento de botellas de agua y de fuegos artificiales por parte de los manifestantes. 

Horas antes, cientos de manifestantes gritaban a la cara de los agentes de policía “¡sin justicia no hay paz!” y “di su nombre — Jacob Blake”. 

¿Qué ocurrió con los policías que agredieron a Jacob Blake?

Un policía disparó por la espalda en varias ocasiones a Jacob Blake, de 29 años. | Foto: AFP

Las autoridades dijeron que dos policías fueron suspendidos y que se inició una investigación luego de los fuertes disturbios registrados en la noche del domingo, cuando varios vehículos fueron incendiados y hubo destrozos en un juzgado.

Antes de un toque de queda impuesto en el condado de Kenosha para preservar el orden público, los residentes clamaban por el fin a la impunidad policial por este nuevo hecho en contra de Jacob Blake.

“Si matara a alguien, me condenarían y me considerarían una asesina. Creo que debería ser lo mismo para la policía”, dijo Sherese Lott, una mujer de 37 años indignada por la brutalidad policial.

Quiero que mis hijos vean cómo se produce el cambio y estoy aquí para que nunca les suceda nada como esto”, dijo Michelle sin dar su apellido, mientras marchaba junto a su marido Kalvin, y sus hijos de ocho y siete años.

El gobernador de Wisconsin, Tony Evers, dijo que enviaría a 125 miembros de la guardia nacional a la ciudad para mantener el orden el lunes por la noche. 

“Debemos estar a la altura de este movimiento y este momento y enfrentarlo con nuestra empatía, nuestra humanidad y un férreo compromiso para interrumpir el ciclo de racismo y prejuicio sistémico que devasta a las familias y comunidades negras”, señaló, instando a la población a mantener las manifestaciones pacíficas.

TE PUEDE INTERESAR:

Qué opinas