Un pingüino murió en Brasil tras ingerir un cubrebocas N-95, según lo reveló su autopsia. El pingüino de Magallanes fue encontrado muerto el pasado 9 de septiembre.
La autopsia del pequeño pingüino fue realizada por el Instituto Argonauta responsable de monitorear las playas de la costa norte de São Paulo para ayudar en la conservación de las áreas costeras.
“El grupo encontró una máscara doblada del modelo N-95, indicada para uso hospitalario, dentro del estómago del pingüino“, dice un comunicado del Instituto.
¿Cómo ingirió el pingüino el cubrebocas N-95?
Según el centro, el pinguino ingirió el cubrebocas dos días después de las fiestas de la independencia, en la playa de Juquehy, en São Sebastião. En ese momento, varias playas de São Paulo fueron ocupadas por turistas a pesar de los llamados de aislamiento social por parte de las autoridades, detalla el documento.
El oceanógrafo Hugo Gallo Neto, presidente del Instituto Argonauta, señala que hay un aumento en la cantidad de basura encontrada en las playas:
“Ya venimos alertando la aparición de cubrebocas, y este caso es una prueba de que este tipo de desperdicio causa daño y mortalidad también en la fauna marina, además de la irresponsabilidad de la persona que dispensa una máscara en un lugar inadecuado y con un riesgo de contaminación por otras personas”.
Neto también afirmó que los desechos encontrados en las playas se están “convirtiendo en un problema crónico“.
“Si sales de Praia Grande con la basura que la gente va dejando, por ejemplo, al día siguiente, nadie querrá ir allí. Se está convirtiendo en un problema crónico de gran impacto“, concluyó.
Aumento de cubrebocas tirados en playas brasileñas
Además de la reciente muerte del pingüino, la institución reveló que los cubrebocas se han convertido en un nuevo tipo de residuo no solo en las playas de São Paulo, sino también en toda la costa brasileña, lo anterior por la pandemia de COVID-19.
Como lo muestra el gráfico, el pico de cubrebocas recolectados en las costas brasileñas se produjo en las vacaciones del 8 de septiembre.
Según el gráfico, se encontraron un total de 113 cubrebocas del 16 de abril hasta el 9 de septiembre en las playas del norte de São Paulo.