Al pie del muro fronterizo, es donde inicia la ruta del infierno para los migrantes que van tras el “Sueño Americano”.
Un grupo de más de 20 personas, entre periodistas y representantes diplomáticos, fuimos traídos al desierto por la Patrulla Fronteriza para vivir la experiencia que implica cruzar la frontera de manera ilegal.
Con un galón de agua en la mano, como lo hacen los migrantes, un “pollero” fue nuestro guía.
“Si les digo que hagan algo, en ese momento lo hacen. ¿Entiende todos? Agarren su agua en mano. And, let´s go, vámonos”.
“Pollero” | Agente de la Patrulla Fronteriza sector El Centro, California
A los minutos de andar sobre la arena hirviendo, a una integrante del grupo se le desprendió la suela de uno de sus zapatos.
Muchos migrantes caminan con una mochila en cuyo interior llevan más agua, ropa o pertenencias que creen pueden ser de ayuda para el trayecto.
“El peso que traes en la mochila no va a ser de gran ayuda, entonces es algo que muchas veces no se toma en consideración para hacer este tipo de travesías, y volvemos a lo mismo, no saben por dónde van a cruzar, no saben cuánto tiempo van a cruzar y ellos se preparan con lo que creen que es necesario para el camino y lamentablemente muchas veces es contraproducente”.
Enrique H. Lozano | Subjefe de la Patrulla Fronteriza en El Centro, California
El desierto entre California y Arizona es de las zonas más cálidas del planeta en el verano, la temperatura puede superar los 55 grados centígrados.
“A poco más de media hora caminando en el desierto, no hay sombra alguna en todo el camino, hay momentos que la señal del teléfono celular se pierde, es peligroso y la temperatura supera los 40 grados centígrados, cuando a penas son las 11 de la mañana, los migrantes llegan desorientados, porque no saben a dónde ir, nosotros por lo menos tenemos un guía de la Patrulla Fronteriza, de no ser así, seguramente nuestro resultado podría ser diferente, igual al de muchos migrantes”.
Alberto Elenes, corresponsal UnoTV
En el actual año fiscal por esta zona han fallecido al menos cinco migrantes y 195 más han sido rescatados por la Patrulla Fronteriza.
“Crucé para el otro lado, pero me agarraron y me tiraron para atrás, encontramos varios ahí en el camino que ya no querían, ya no querían, yo creo que esas personas ni cuenta se dan los familiares, porque se quedan en la arena y ahí nadie los va a recoger”.
Ariel Urquía | Migrante de Honduras