Los manifestantes de China contra la política de “cero COVID” y el gobierno desbordan de imaginación, inventando símbolos como la hoja de papel en blanco para denunciar la censura o ingeniosos juegos de palabras para exigir la dimisión del presidente Xi Jinping.
¿Hojas en blanco como protesta?
Los manifestantes de varias ciudades, incluyendo Pekín, exhibieron el domingo hojas de papel blanco de tamaño A4 en señal de solidaridad y como guiño a la falta de libertad de expresión en China. Otros publicaron cuadros blancos en sus perfiles de WeChat.
En las redes circularon fotos, que se hicieron virales, de estudiantes de la prestigiosa universidad china, Tsinghua, con carteles que mostraban las ecuaciones de Friedmann, elegidas por la similitud entre el nombre del físico y la frase “freed man” (hombre liberado) o “freedom” (libertad).
En reacción al bloqueo de palabras clave y nombre de lugares relativos a las protestas en los motores de búsqueda, florecieron en WeChat y en Weibo etiquetas absurdas con significados “positivos”, incluyendo algunas que simplemente decían “bien bien bien bien” o “bueno bueno bueno bueno”.
El lunes, muchas de esas publicaciones y las referencias a las hojas en blanco fueron borradas, aunque siguieron difundiéndose publicaciones similares.
Los usuarios de las redes sociales también recurrieron a complicados juegos de palabras para hablar de las protestas, utilizando términos como “cáscara de plátano”, que tiene las mismas iniciales que el nombre del presidente Xi Jinping en chino, y “mousse de camarón”, que suena similar a la frase “dimisión”.
El sarcasmo para la protesta en China
Durante el fin de semana, algunos manifestantes pidieron explícitamente la dimisión de Xi y gritaron lemas como “No a las pruebas COVID-19, sí a la libertad”, en referencia a una pancarta colgada por un manifestante en Pekín justo antes del Congreso del Partido Comunista en octubre.
Otros, más cautelosos, conmemoraron con flores y velas a las víctimas de un incendio mortal en Xinjiang la semana pasada que provocó una ola de ira en China.
En Pekín, una multitud reunida junto al río Liangma coreaba el domingo por la noche “¡Quiero hacerme las pruebas COVID! ¡Quiero escanear mi código QR de salud!”, inspirando a los usuarios de Weibo a publicar frases igualmente sarcásticas.
Videos de Xi, así como declaraciones suyas, han sido manipuladas para que parezcan apoyar las manifestaciones masivas, incluyendo un video en el que decía: “Ahora el pueblo chino está organizado y no se puede jugar con él”.
Música y fútbol
En varios lugares de China, grupos cantaron el himno nacional y la Internacional en sus concentraciones, adelantándose a las acusaciones de las autoridades de que las protestas eran antipatrióticas o instigadas por fuerzas extranjeras.
Y un video viral que fue rápidamente retirado por los censores mostraba a estudiantes en una residencia universitaria cantando la canción “Océanos sin límites, cielos inmensos” del grupo pop cantonés Beyond, una oda a la libertad que también adoptaron los manifestantes prodemocráticos de Hong Kong antes de la pandemia.
Los internautas también difundieron memes sobre el Mundial de Fútbol de Qatar 2022, utilizando imágenes de aficionados sin mascarilla para burlarse de la estricta política en China.
En un video muy compartido en las redes sociales, que ya fue censurado, un usuario superpuso el audio de personas que gritaban “¡ponte la mascarilla!” y “hazte una prueba de COVID” sobre escenas de espectadores del Mundial.
La “Gran muralla electrónica” en China
Las redes sociales como Twitter e Instagram están bloqueadas en China por la “Gran muralla electrónica”, un cortafuegos que censura internet, pero algunos ciudadanos expertos en tecnología han podido publicar información sobre las protestas utilizando un software especial de red privada virtual (VPN).
Para difundir el mensaje más allá de las fronteras de China, cuentas de Twitter gestionadas de forma anónima reciben videos enviados desde todo el país, mientras que se han organizado varias transmisiones en directo de las protestas en Instagram.
Y estudiantes chinos en el extranjero han organizado manifestaciones similares en todo el mundo, incluso en varias ciudades norteamericanas y europeas.
En un video publicado en Instagram, manifestantes corean y colocan una pancarta frente al consulado chino en Toronto, una pancarta “calle Urumqi”, nombre de una calle de Shanghái en la que confluyeron los manifestantes tras el incendio de Urumqi.