El narcotraficante mexicano conocido como “La Barbie” ya no se encuentra en los registros estadounidenses como en custodia por parte del país norteamericano, de acuerdo con el buscador de prisioneros de la Agencia Federal de Prisiones de Estado Unidos.
Se sabía que el narcotraficante cumplía condena dentro de una prisión federal en el estado de Florida.
La información a la que se puede acceder a través del portal del Buró Federal de Prisiones (BOP, por sus siglas en inglés), arroja que Edgar Valdez Villareal no se encuentra bajo la custodia de la BOP.
A través del portal oficial estadounidense, se puede ver que el registro de “La Barbie” es el número 05658-748, donde se describe como un hombre de 49 años (edad que tenía cuando fue extraditado), y de raza blanca, además, la fecha de su libertad se muestra que estaba programada para el 27 de julio de 2056.
“La Barbie”, los cargos y su detención
El 30 de agosto del año 2010, Edgar Valdez fue detenido en el Estado de México en un operativo de la Policía Federal, por los cargos de delitos de delincuencia organizada, privación ilegal de la libertad, delitos contra la salud y homicidio calificado.
En territorio mexicano permaneció tras las rejas alrededor de cinco años, para posteriormente ser extraditado a Estados Unidos, donde enfrentó cargos en Texas, Luisiana y Georgia por narcotráfico y lavado de dinero.
Un junio 11 de 2018, se dio a conocer que fue sentenciado a 49 años y un mes de cárcel y a pagar 192 millones de dólares en Atlanta, Estados Unidos.
¿Quién es “La Barbie”?
“La Barbie” nació en Laredo, Texas, el 11 de agosto de 1973 e inició su carrera delictiva en Estados Unidos, donde fue detenido en tres ocasiones, por daños, narcotráfico y posesión de mariguana.
Fue un importante integrante dentro de la estructura de operación y de sicarios del cártel de Sinaloa, donde el jefe era Joaquín “El Chapo” Guzmán.
De acuerdo con la Procuraduría General de la República (PGR), se le atribuía la creación de los halcones, un grupo de jóvenes que eran reclutados para mantener informados a los cárteles.
Era considerado uno de los narcotraficantes más buscados, la PGR ofrecía una recompensa de 30 millones de pesos por información que llevara a su captura, mientras que Estados Unidos daba 5 millones de dólares.