De manera similar a como ocurrió con Donald Trump, este miércoles la policía federal de Estados Unidos registró la casa de playa del presidente Joe Biden en Delaware, en busca de documentos clasificados guardados indebidamente.
El operativo en la ciudad costera de Rehoboth fue confirmado por Bob Bauer, uno de los abogados del mandatario, quien además destacó que éste se realizó “con pleno apoyo y cooperación del presidente”, toda vez que hubo un registro previo en otra casa de Biden en la ciudad de Wilmington, también en el estado de Delaware.
Asimismo, el defensor apuntó que el cateo del Departamento de Justicia inició sin “aviso público previo”, toda vez que buscaban en ambas propiedades documentos confidenciales guardados de las épocas del demócrata Joe Biden como vicepresidente y senador.
“La búsqueda de hoy es un paso más en un proceso exhaustivo y oportuno del Departamento de Justicia que continuaremos apoyando y facilitando por completo. Tendremos más información al finalizar la búsqueda de hoy”, señaló en un comunicado.
El presidente suele pasar los fines de semana en Wilmington o, con menos frecuencia, en Rehoboth.
¿Por qué los operativos?
Desde noviembre, una serie de documentos confidenciales, cuyo número exacto y contenido se desconoce, han sido encontrados tanto en una oficina que ocupaba Biden en un centro de estudios en Washington como en su casa en Wilmington.
Estos documentos se remontan a la época en que Biden era vicepresidente de Barack Obama (2009-2017) y a sus tres décadas en el Senado, durante las cuales se ocupó extensamente de la política exterior.
El Departamento de Justicia designó a un fiscal especial para investigar estos hallazgos, embarazosos para el presidente demócrata porque evocan, pese a muchas diferencias, un caso de archivos oficiales llevados a Florida por su antecesor, el republicano Donald Trump.