Jeanine Áñez, expresidenta de Bolivia, envió un mensaje desde el Penal Femenino de Miraflores, en La Paz, en el que aseguró: “Ya no quiero vivir. Mis hijos necesitan hacer su vida”, tres días después de fracasar en un intento de suicidio mientras lleva un proceso judicial.
Acusada de genocidio, terrorismo y conspiración tras el golpe de Estado que exilió al expresidente Evo Morales en noviembre de 2019, Jeanine Áñez agregó en un mensaje emitido en su cuenta de Twitter que tampoco desea tomar medicamentos “que no” sabe “cuáles son”.
“Ya no quiere vivir. Mis hijos necesitan hacer su vida. Ya no quiero más medicamentos que no sé cuáles son. Pido por favor a mis carceleros que me digan qué estoy tomando”.
Jeanine Áñez desde cárcel de Bolivia.
“Ya no quiero vivir” resuena en redes
La expresidenta interina derechista Jeanine Áñez se autolesionó los brazos el pasado 22 agosto en Bolivia; está encerrada desde marzo de 2021, y su hija, Carolina Ribera, quien la visita en la cárcel, confirmó que su madre muestra pocas ganas de vivir y carece de tranquilidad.
El 23 de agosto, autoridades penitenciarias de Bolivia informaron que el estado de salud de Jeanine Áñez era “estable”, y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recomendó brindarle atención médica y psicológica para resguardar su integridad, a fin de que recupere las ganas por vivir.
Jeanine Áñez en Bolivia
Jeanine Áñez fue presidenta interina de Bolivia del 12 de noviembre de 2019 al 8 de noviembre de 2020. Llegó al poder luego que el Ejército desconoció al Gobierno de Evo Morales, acusándolo de un fraude electoral. Ahora, en su contra, pesan los cargos de sedición, terrorismo y conspiración.
La abogada, presentadora de televisión y política nació en el departamento de Beni, el 13 de junio de 1967. Es la segunda mujer en la historia del Estado Plurinacional de Bolivia en el cargo de presidenta, después de Lidia Gueiler Tejada (1979-1980), funcionaria que impulsó la igualdad de género.