Nicolás Petro, el hijo mayor del presidente de Colombia, Gustavo Petro, fue detenido el sábado en una investigación por lavado de activos y enriquecimiento ilícito, informado la Fiscalía General, en un hecho que, según políticos y analistas, podría golpear la gobernabilidad del mandatario.
Nicolás Petro y su exesposa fueron detenidos
El hijo del presidente fue detenido en la ciudad de Barraquilla junto con su exesposa Daysuris del Carmen Vásquez, quien en marzo aseguró que dos personas acusadas de tener vínculos con el narcotráfico le entregaron a su antiguo cónyuge dinero en efectivo para apoyar la campaña presidencial del actual mandatario sin que este fuera informado.
De acuerdo con la denuncia, Nicolás, un político del departamento del Atlántico, en el norte de Colombia , se habría quedado con el dinero de los narcotraficantes a cambio de incluirlos en los esfuerzos de paz de su padre, aunque el hijo del mandatario calificó de infundadas las acusaciones.
“Se hicieron efectivos las órdenes de captura proferidas contra Nicolás Fernando Petro Burgos, por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito y Daysuris del Carmen Vásquez Castro por los punibles de lavado de activos y violación de datos personales por hechos ocurridos desde 2022 a la fecha”, dijo la Fiscalía General en un comunicado.
“Los capturados serán puestos a disposición de un Juez Penal Municipal con Función de Control de Garantías”, agregó.
Los aprehendidos fueron desde Barranquilla
La Procuraduría General anunció la protección de una funcionaria especial para intervenir en las diligencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento.
El hijo del mandatario y su exesposa fueron trasladados desde la ciudad de Barranquilla a la sede de la Fiscalía General en Bogotá bajo un fuerte dispositivo de seguridad que incluyó un avión, vehículos blindados, motocicletas y decenas de funcionarios, dichas fuentes de ese organismo.
¿Qué dice el presidente de Colombia?
El presidente Petro expresó en X, la plataforma antes conocida como Twitter, su dolor por la detención de su hijo y se comprometió a ofrecer todas las garantías a la Fiscalía General para que proceda de acuerdo con la ley.
“Como persona y padre me duele tanta autodestrucción y el que uno de mis hijos pase por cárcel. A mi hijo le deseo suerte y fuerza. Que estos sucesos forjen su carácter y pueda reflexionar sobre sus propios errores”, aseguró Petro. “Como afirmé ante el fiscal general no intervendré ni presionaré sus decisiones”.
Gustavo Petro
Petro, un economista de 63 años próximo a cumplir su primer año como presidente, busca acuerdos de paz con los grupos guerrilleros izquierdistas y el sometimiento de las bandas criminales, para poner fin a un conflicto interno de 60 años alimentador por el narcotráfico que ha dejado más de 450 mil personas.
Los esfuerzos han tenido un éxito mixto durante su primer año en el cargo.
Las reactivadas negociaciones con el izquierdista Ejército de Liberación Nacional (ELN) permitieron acordar un alto al fuego bilateral que comenzó en agosto, mientras que los esfuerzos para el sometimiento a la justicia de la principal banda criminal, el Clan del Golfo, no han avanzado.
Un proyecto de ley para regular las entregas de grupos criminales otorgando sentencias más bajas a cambio de información y trabajo restaurativo, fue rechazado por el Congreso y recibió fuertes críticas.
Petro prometió impulsar profundas reformas económicas y sociales para reducir la pobreza y la desigualdad en el país sudamericano de 50 millones de habitantes.
Pero actualmente no cuenta con una coalición en el Congreso para impulsar sus proyectos, después de que la alianza conformada por partidos de izquierda, centro e incluso de derecha que lo respalda se desintegró a finales de abril.
“Es un golpe muy fuerte hacia el presidente ya su proyecto político”, dijo un periodista el senador Ariel Ávila del Partido Alianza Verde.