Francia exigirá un test negativo de COVID-19 de menos de 24 horas a todos los viajeros procedentes de algunos países europeos, entre ellos España, anunció el primer ministro Jean Castex en un comunicado.
La medida, que afecta a los ciudadanos que no están vacunados, entra en vigor este domingo a medianoche y afecta a todas las personas procedentes de Reino Unido, España, Portugal, Chipre, Grecia y Holanda, según este comunicado.
Hasta ahora los viajeros del Reino Unido tenían que presentar un test negativo de un máximo de 48 horas y los del resto de países europeos, de hasta 72 horas.
“Al mismo tiempo y porque las vacunas son eficaces contra el virus, concretamente sobre la variante Delta, las restricciones que pesan sobre los viajeros ya vacunados totalmente con una vacuna reconocida por la Agencia Europea de Medicamentos (Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Janssen) se levantarán a partir de este sábado, 17 de julio, sea cual sea su país de procedencia”, agregó el texto.
Además, la oficina del primer ministro también confirmó que la lista “roja” de países se amplía e incluye a partir de ahora a Cuba, Indonesia, Túnez y Mozambique.
Los viajeros procedentes de estos países deben tener un motivo de peso para justificar el desplazamiento e, incluso si están vacunados, tienen que respetar a su llegada una cuarentena de siete días.
Los nuevos casos de COVID-19 siguen aumentando en Francia y ya superaron los 10 mil por día, aunque los ingresos en los hospitales no se han incrementado, según las cifras oficiales del gobierno.