Parece normal; sin embargo, se trata de un secreto que ya no es tan secreto, se trata del escritorio de los dulces de los senadores de Estados Unidos, el cual se dice que, tiene el poder de reunir a demócratas y republicanos.
¿Cuál es el misterio del escritorio de los dulces de los senadores?
A simple vista parece un simple mueble de caoba, pero este lugar para senadores de Estados Unidos parece que tiene su origen desde hace más de medio siglo.
¿Cuál es su función?
Está listo para endulzar las largas sesiones nocturnas de debates y votaciones, e incluso los juicios de destitución, este tesoro está escondido en la última fila, en el lado republicano, junto a una de las puertas más concurridas.
La misión del escritorio de los dulces es crucial, no es fácil, ya que el senador que la ocupa tiene que asegurarse de que su cajón siempre esté lleno. Especialmente durante semanas de intensas negociaciones como las que el Congreso acaba de llevar a cabo sobre los planes de inversión de Joe Biden: la deuda estadounidense y el presupuesto.
“Puedo garantizarles que el escritorio de los dulces está actualmente, y seguirá estando, bien abastecido.”
Pat Toomey, senador de Pensilvania
¿Cómo ayuda este secreto, no tan secreto?
Los legisladores, casi 30 de los cuales tienen más de 70 años, se encuentran a veces atrapados en el Senado durante la noche, a la espera de una votación decisiva, y reciben un impulso de energía con los chocolates y golosinas.
¿Cómo inició esta curiosa tradición?
Se dice que la tradición del escritorio de los dulces comenzó en 1968, cuando un republicano californiano, el actor y bailarín George Murphy, se instaló en ese sitio. Él era conocido por su afición a los dulces, e invitaba a sus colegas a compartir su provisión de bombones, que guardaba en el cajón.
Desde entonces, la dulce costumbre ha continuado con otros republicanos que han ocupado esa mesa, como John McCain o Rick Santorum, que se sentaron allí durante el juicio de destitución de Bill Clinton, en el caso Monica Lewinsky.