Este martes 16 de febrero el volcán Etna, en Italia, volvió a dar un espectáculo cuando entró en erupción.
La erupción, que fue captada por diversos medios locales y usuarios de redes sociales, provocó una nube de ceniza que obligó a suspender las operaciones del aeropuerto de Catania, en la costa este de Sicilia.
“Debido a la actividad eruptiva del Etna y a consecuencia de las copiosas cenizas volcánicas, la pista del aeropuerto de Catania se encuentra cerrada por el momento: se están realizando actividades de limpieza y recuperación”, informaron a través de Twitter.
De acuerdo a los servicios de emergencia italianos el cráter del sureste del monte, ubicado en el Valle del Bove, comenzó a emitir cenizas y coladas de lava que llegaron a los municipios de Catania, Nicolosi y otros aledaños.
El volcán Etna es uno de los volcanes más activos de Europa.
El evento está siendo monitoreado por el Departamento de Protección Civil quienes, por el momento, no han alertado de posibles riesgos a causa de este evento, aunque siguen revisando la situación en las localidades de Linguaglossa, Fornazzo y Milo.
Por su parte, el director del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), Stefano Branca, aseguró que “hemos visto situaciones peores” y que el fenómeno “no fue nada preocupante”.
Si bien este no ha sido un evento aislado en lo que va de este 2021, medios italianos enfatizaron las impresionantes imágenes que dejó la erupción, con una enorme columna de humo, además de caída de cenizas y piedras en distintas zonas de la provincia de Catania.
A mediados de enero, el cráter sureste ya había sido protagonista de un evento similar con un desbordamiento de lava tras semanas de actividad.
Días más tarde, el pasado 4 de febrero, Etna registró nuevamente una erupción. En esa oportunidad, sin embargo, estuvieron activos los cuatro cráteres del macizo de más de tres mil metros de altura. Esto no sucedía desde finales de los años 90.