Las autoridades salvadoreñas han detenido a más de 9 mil presuntos pandilleros en los últimos 15 días, anunció el presidente Nayib Bukele.
Esto se da en medio de un estado de excepción impulsado por el mandatario luego de un repunte de homicidios que del 25 al 27 de marzo dejó 87 personas muertas.
“Más de 9 mil pandilleros detenidos en solo 15 días. Seguimos guerra contra pandillas”, aseguró el mandatario, criticado por organismos humanitarios locales e internacionales por presuntas violaciones a los derechos humanos.
El Salvador, no había realizado en las últimas dos décadas detenciones de miles de supuestos pandilleros en tan corto período.
¿Por qué han detenido ha más de 9 mil maras?
La Policía reivindicó que desde el inicio “de la guerra contra pandillas (maras)” puso tras las rejas, a 9 mil 120 de sus miembros.
La detención se debe a la violencia e inseguridad generada por estos grupos. En respuesta, la policía y el ejército iniciaron arrestos masivos el 26 de marzo y un día después el Congreso, controlado por los oficialistas, aprobó un estado de excepción que da cobertura legal a las detenciones sin orden judicial.
Además, el Congreso aprobó, a petición de Bukele, reformas para aumentar de nueve a 45 años de prisión la pena máxima por pertenecer a pandillas y castigar con hasta 15 años de prisión la difusión de mensajes de pandillas en medios de comunicación.
La legislación también va dirigida contra aquellos que “marquen” sus territorios con siglas, una práctica que los pandilleros usan para amedrentar y amenazar de muerte a quienes los denuncian ante las autoridades.
Las pandillas Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18, entre otras, suman unos 70 mil miembros, y hasta marzo 16 mil de ellos están en prisión, pero de acuerdo con los informes de las últimas detenciones, la cifra ascendería a más de 25 mil privados de libertad.
Unicef en contra de la violencia
Para procesar a los detenidos, la Corte Suprema de Justicia creó 15 Juzgados Especializados de Instrucción, y los ya existentes juzgados de menores.
“La violencia de pandillas (maras) es inaceptable; daña significativamente a las comunidades y pone a muchos niños, niñas y adolescentes en riesgo de vincularse al mundo del crimen”, consignó el jueves en un comunicado el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Unicef censuró la reciente reforma a la ley penal juvenil para que niños y adolescentes pertenecientes a pandillas que tengan entre 12 y 15 años de edad enfrenten hasta 10 años de prisión. Los mayores de 16 años podrían tener hasta 20 años de prisión.
EU preocupado
“Estamos sumamente preocupados por el alza de violencia y homicidios cometidos en El Salvador, el 25, 26 y 27 de marzo, por las pandillas MS-13 y Barrio 18“, consignó una declaración del secretario de Estado Antony Blinken.
Según el texto firmado por Blinken, “las pandillas representan una amenaza a la seguridad nacional tanto de El Salvador como de los Estados Unidos. Urgimos a El Salvador abordar esta amenaza protegiendo al mismo tiempo libertades civiles vitales, incluyendo la libertad de prensa, el debido proceso y la libertad de expresión”.