Joe Biden, el aspirante demócrata a la Casa Blanca, evitó una vez más eventos públicos de campaña dos semanas antes de las elecciones, probablemente para prepararse para el debate final con el presidente Donald Trump previsto para esta semana.
El candidato de 77 años tampoco hizo actos o recorridos el lunes, y solo salió de su casa en el estado de Delaware para realizar una entrevista televisiva. Y el martes, por segundo día consecutivo, el demócrata decidió quedarse en casa.
El equipo de campaña del exvicepresidente dijo la mañana de este miércoles que no se esperaban eventos públicos o apariciones por el resto del día, aunque podría haber entrevistas locales.
Los últimos eventos públicos que tuvo Joe Biden fueron el domingo en Carolina del Norte, otro estado clave para ganar el 3 de noviembre. Aunque el dúo de Biden con Kamala Harris gozan de una sólida ventaja en las encuestas nacionales frente a Trump, quien busca su segundo mandato, lidera menos en estados indecisos como Florida.
La estrategia de campaña de Biden, de eventos discretos con pequeñas audiencias que usan máscaras y mantienen a rajatable la distancia física, mezcladas con días sin actividad pública, marcan un fuerte contraste con el ritmo frenético del presidente republicano.
Donald Trump, de 74 años, ha estado yendo de una punta a otra del país prácticamente sin parar desde que sus médicos le dieron luz verde nueve días después de que se diagnosticara su infección por COVID-19 el 1 de octubre.
- El presidente estuvo en un estado diferente todos los días la semana pasada.
El domingo hizo campaña en Nevada, donde llamó a los republicanos “estúpidos” por criticarlo públicamente, y lanzó amargos ataques contra Biden el lunes en dos mítines abarrotados en Arizona. El martes Trump iba a realizar un mitin en el estado clave de Pensilvania.