El Papa Francisco inició este domingo la celebración de una misa ante varios miles de fieles repartidos en un estadio de Erbil, la capital regional del Kurdistán, la mayor liturgia durante su viaje a Irak en plena pandemia por COVID-19.
Dado que las vacunas siguen siendo muy limitadas en Irak y ante el temor de que la misa fomente los contagios, las autoridades restringieron la asistencia al estadio Franso Hariri, que suele albergar a 20 mil personas.
¿Cómo llegó el Papa a Irak?
El Papa Francisco llegó este domingo a Mosul, gran ciudad del norte de Irak, donde el grupo yihadista Estado Islámico (EI) sembró el terror y la muerte entre 2014 y 2017.
Cinco helicópteros iraquíes escoltaron al primer sumo pontífice de la historia en viajar a Irak. Luego fue trasladado en un coche blindado hasta las ruinas de una iglesia milenaria en el centro de Mosul, donde elevó plegarias por “las víctimas de la guerra“.
- La marcha de los cristianos de Oriente Medio es un “daño incalculable“, estimó el Papa Francisco en medio de los escombros de la guerra contra los yihadistas en Mosul, en el norte de Irak.
La ocupación de un tercio del país por parte del grupo Estado Islámico (EI) de 2014 a 2017 fue el último episodio de una serie de conflictos en Irak que llevaron a la mayoría de cristianos al exilio. En el país sólo quedan 400 mil, frente al millón y medio en 2003, antes de la invasión estadounidense.
Cristianos iraquíes vitorean al Papa Francisco
Posteriormente, el Papa Francisco arribó a la ciudad iraquí de Qaraqosh (norte), donde se reunió con fieles en la iglesia de Al Tahira, renovada para la ocasión después que los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) la incendiaran en 2014.
Su comitiva fue recibida por los vítores de los cristianos que huyeron hace tres años de la ocupación yihadista de la ciudad, vestidos con trajes tradicionales y agitando palmas.
El Papa concluye su visita histórica a Irak
El Papa Francisco concluyó su histórica visita a Irak con esta misa ante miles de fieles en el norte asolado por los yihadistas, llamando a los cristianos a “no desanimarse”.
- Comenzó la misa en latín, con la capa pluvial morada en la espalda y el solideo blanco en la cabeza, ante una asamblea silenciosa y recogida, la primera de un Papa en ese país.
“Irak siempre estará conmigo, en mi corazón”,
Dijo el Papa al concluir la ceremonia en Erbil, en el Kurdistán iraquí.