Los soldados del Ejército de Estados Unidos que rechacen vacunarse contra el COVID-19 podrían ser expulsados de las Fuerzas Armadas del país. La medida afectaría a más de 3 mil uniformados porque al no contar con las vacunas son considerados “un riesgo para la fuerza y ponen en peligro la preparación”.
Las sanciones que se alistan para los soldados que han rechazado ser vacunados contra el coronavirus fueron anunciadas por la secretaria del Ejército, Christine Wormuth, en un comunicado.
De acuerdo con la instrucción, se pide que se inicie la “separación administrativa involuntaria” de los militares que rechacen ser vacunados contra el COVID-19 y no tenían ninguna exención.
“Los soldados no vacunados presentan un riesgo para la fuerza y ponen en peligro su separación. Comenzaremos procedimientos de separación involuntaria para los soldados que rechacen la orden de vacunación y no estén pendientes de una decisión final sobre una excepción”
Comunicó Christine Wormuth, secretaria del Ejército
Wormuth pidió a los comandantes cumplir con esta orden “lo más rápido posible”.
El 96% de los militares en activo del Ejército estaba completamente vacunado, de acuerdo con datos oficiales. Sin embargo, 3 mil 350 soldados habían rechazado inmunizarse y ya contaban con una reprimenda oficial.
En cuanto a los uniformados que habían recibido una exención temporal, se contabilizaron unos 5 mil 900. Aquellos que realizaron la solicitud de una exención por motivos médicos o religiosos, estarán exentos de manera temporal del requisito de vacunación hasta que sus peticiones sean evaluadas.