Donald Trump manifestó este sábado un entusiasmo inquebrantable con la esperanza de alcanzar a su rival demócrata Joe Biden, quien lo criticó por su manejo de la pandemia y recibió el refuerzo del expresidente Barack Obama durante un día de campaña de gran intensidad.
“Esta elección es una elección entre una súper recuperación de Trump o una depresión de Biden”, lanzó el presidente estadounidense 10 días antes de la votación en la soleada Carolina del Norte ante un público convencido, destacando su propia superación del COVID-19 para prometer una rápida recuperación económica.
Lleno de energía tras haber votado temprano en la mañana en Florida, “por un tipo llamado Trump”, según dijo, realizó posteriormente una serie de actos en otros dos estados de vital importancia para las elecciones del 3 de noviembre: Ohio y Wisconsin.
“Las encuestas son mucho mejores que hace cuatro años. Además, se están acercando peligrosamente”, aseguró Donald Trump de 74 años, que retomó la campaña a un ritmo frenético tras su hospitalización.
Y pese al saldo de más de 224 mil muertes por COVID-19 en Estados Unidos, el récord de alrededor de 80 mil nuevos casos registrados el día anterior o los ataques de los demócratas, el inquilino de la Casa Blanca se dice optimista.
“Quieren deprimirlos”, le dijo a la multitud.
“Esto es lo que es la presidencia de Trump”, señaló por el contrario Joe Biden, quien, tras un paréntesis de casi una semana, volvió a su natal Pensilvania, un estado donde en 2016 el republicano triunfó de manera sorpresiva.
“Ayer fue el peor día que hemos tenido, pero nuevamente el jueves por la noche, durante el debate, Donald Trump dijo y sigue diciendo que estamos al final del túnel, que (el virus) se va y que vamos a aprender” a convivir con él, dijo el exvicepresidente.
“Yo le dije que no estamos aprendiendo a vivir con el virus, pero él nos está pidiendo que nos muramos con él”, afirmó en un escenario decorado con calabazas de Halloween frente a simpatizantes que habían llegado en auto.
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Trump no hizo más que errar ante COVID-19: Obama
El exvicepresidente de Barak Obama puede contar con el apoyo del primer presidente negro de Estados Unidos, quien este sábado sostuvo un encuentro en formato “drive-in” en Florida, un estado en el que ganó en 2008 y 2012 .
El 44º presidente estadounidense, todavía muy popular entre los demócratas, no perdonó a su sucesor, en medio de los sonidos de bocinas que ahora han reemplazado a los aplausos.
“Esta pandemia habría sido difícil de gestionar para cualquier presidente”, pero “la idea de que esta Casa Blanca hizo algo más que equivocarse por completo es absurda”.
Barak Obama, expresidente de Estados Unidos.
“Donald Trump no nos va a proteger ahora de improviso. Ni siquiera puede tomar las precauciones más elementales para protegerse a sí mismo”, ironizó.
“Si no puede responder a una pregunta como ‘¿Qué le gustaría hacer con su segundo mandato?’, entonces depende de nosotros asegurarnos de que no tenga un segundo mandato”, señaló Obama.
En Twitter, Donald Trump respondió de inmediato: “Nadie va a los discursos de odio de Obama. ¡47 personas! ¡Sin energía, pero mejor que Joe!”
Es estúpido hacer tantos tests de COVID-19: Trump
“Covid, covid, covid … ¡El 4 de noviembre no escucharemos más hablar de eso!”, dijo Trump en Carolina del Norte, asegurando una vez más que el aumento en el número de casos del nuevo coronavirus se debió a la mayor cantidad de pruebas realizadas.
“¿Saben por qué tenemos tantos casos? Porque hacemos muchos tests. Y en muchos sentidos, eso es bueno, y en muchos otros, es estúpido. En muchos sentidos, es muy estúpido”, afirmó Trump desde la ciudad de Lumberton.
Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
Como más de 55 millones de personas que ya emitieron su voto de manera anticipada, Donald Trump cumplió con su deber cívico temprano en la mañana en una biblioteca en West Palm Beach, cerca de su propiedad de Mar-a-Lago, su residencia fiscal desde que salió de Nueva York, donde fue abucheado hace cuatro años cuando acudió de votar.
“Estarán muy ocupados hoy, vamos a hacerlos trabajar muy duro”, dijo a los periodistas al comienzo de un largo día de campaña en cuatro estados.
Trump prometió volver a acelerar el ritmo en la recta final asistiendo a cinco reuniones por día.
Las encuestas aún le dan a Joe Biden una ventaja de ocho puntos en promedio a nivel nacional, pero esa distancia se reduce en estados clave.
Donald Trump parece de todas maneras estar recuperando algo de terreno en Florida, un estado que no puede permitirse perder si quiere ser reelegido.
