Donald Trump, presidente de Estados Unidos, admitió que minimizó la gravedad de la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19) para evitar causar pánico e histeria en los mercados y la población; el mandatario lo sabía incluso antes de que se confirmara la primera muerte por esa enfermedad en su territorio, además de que era consciente del peligro que representaba el virus.
Esto, según extractos liberados el miércoles en el nuevo libro Rage (2020), del periodista veterano de investigación Bob Woodward, quien es un profundo crítico de la administración del magnate neoyorquino. Desde la Casa Blanca, el presidente respondió a la pregunta sobre si había engañado a los estadounidenses del peligro que suponía la pandemia del coronavirus, y esto respondió:
“Bueno, creo que, si dijeras para reducir el pánico, quizás fue así. Entonces, el hecho es que soy un animador de este país. Amo nuestro país. Y no quiero que la gente se asuste. No quiero crear pánico, como dices. Y ciertamente no voy a llevar a este país o al mundo a un frenesí.”.
Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
“Siempre quise restarle importancia”, dijo Donald Trump en una entrevista con Bob Woodward el 19 de marzo, según un adelanto de Cable News Network (CNN) del libro Rage, que se publicará en el país vecino del norte el próximo martes 15 de septiembre. La cadena de CNN ha sido señalada por el mandatario por ser una fábrica de fake news contra su administración, en contexto del ejercicio del periodismo.
- “Todavía me gusta minimizarlo, porque no quiero crear pánico”, dijo Donald Trump en la conversación con Bob Woodward, que fue grabada.
- Bob Woodward es un investigador que tiende a guardar sus fuentes en el anonimato, pero en esta ocasión la grabación representa una evidencia contundente contra el presidente.
Por el contrario, en entrevistas anteriores con Bob Woodward, Donald Trump dejó en claro que entendía que el COVID-19 era “mortal” y mucho más peligroso que la gripe común. Sin embargo, Donald Trump ha estado diciendo repetidamente en público que el nuevo coronavirus no debería considerarse un gran peligro y que “desaparecerá” por sí solo, gracias a los cambios de estaciones, entre otros aspectos.
Donald Trump y la pandemia de COVID-19
Donald Trump comenzó a utilizar cubrebocas en público recién en julio, seguramente cuando sus consejeros le recomendaron poner el ejemplo en medio de la campaña rumbo a las elecciones presidenciales del martes 3 de noviembre de 2020. Al principio también elogió frecuentemente la respuesta del Gobierno de China, y después cambió su retórica, afirmando que su amistad con el presidente Xi Jinping se deterioró sin remedio.
Se espera que las muertes por COVID-19 superen pronto los 200 mil casos en Estados Unidos. Donald Trump ha repetido insistentemente en que ha manejado la pandemia con éxito, señalando sus tempranas decisiones de prohibir los viajes de China, donde apareció primero el virus, y de los lugares más afectados de Europa. Sin embargo, encuestas de opinión muestran que dos tercios de los estadounidenses desaprueban las acciones.
- Rivales políticos de Donald Trump se encargan de desprestigiar su figura en la recta final de la campaña.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca de Washington D.C., Kayleigh McEnany, dijo a los periodistas que la única motivación de Donald Trump para minimizar los peligros del COVID-19 había sido tranquilizar al público: “Es importante expresar confianza y calma […] El presidente nunca ha mentido al público estadounidense sobre el COVID-19”, agregó la encargada del puesto al que ya han renunciado tres antecesores.
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