Los equipos de rescate en Turquía y el norte de Siria luchan contra el reloj y el frío para buscar entre los escombros a supervivientes del violento sismo del lunes, cuyo balance ya superó los 7 mil 300 muertos.
La ayuda internacional llegará a partir de este martes a las zonas devastadas por el terremoto y sus réplicas. La primera sacudida, en la madrugada del lunes, alcanzó una magnitud 7.8 y se sintió hasta en Líbano, Chipre y el norte de Irak.
En Turquía, el número de muertos aumentó a 5 mil 434, según el último balance de las autoridades, mientras que en Siria murieron al menos mil 872 personas, lo que suma un total de 7 mil 306 víctimas mortales.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, decretó el estado de emergencia por un periodo de tres meses en 10 provincias del sureste que fueron azotadas por el devastador sismo.
En base a los mapas de la zona afectada, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que “23 millones de personas están expuestas” a las consecuencias del terremoto, “incluyendo cinco millones de personas vulnerables”.
Llegada de ayuda internacional por terremoto en Turquía y Siria
Las malas condiciones meteorológicas en la región de Anatolia complican las labores de rescate y ensombrecen las perspectivas de los supervivientes, que se calientan en tiendas o junto a hogueras improvisadas.
La ayuda internacional a Turquía llegará a partir de este martes con los primeros equipos de socorristas procedentes de Francia y Qatar.
El contingente francés pretende llegar hasta Kahramanmaras, en la zona del epicentro, una región de difícil acceso que está sepultada bajo la nieve.
Por otro lado, México anunció el envío de un avión de la Fuerza Aérea Mexicana, con rescatistas del Ejército y la Marina, Cruz Roja, Protección Civil, así como binomios caninos, quienes apoyaran en las labores y trabajos de rescate.
El presidente estadounidense, Joe Biden, prometió a su homólogo turco “toda la ayuda necesaria, sea la que sea”.