Un saldo de siete muertos y cuatro heridos dejó el tiroteo al interior de un Walmart, este martes por la noche, en la ciudad estadounidense de Chesapeake, Virginia, entre las que se encuentra el agresor, quien era empleado de la tienda y se habría suicidado durante el ataque.
Mientras que el tiroteo en Virginia se da a menos de 48 horas del Día de Acción de Gracias y media semana después de la matanza en un club LGBTQ de Colorado que dejó cinco muertos.
“La policía de Chesapeake confirma siete muertos, incluyendo al hombre que disparó, tras el tiroteo de anoche (martes) en Walmart en Sam’s Circle“, dijo en Twitter el gobierno municipal.
Mientras que el oficial del departamento de policía local, Leo Kosinski, informó poco antes a la prensa que se encontraron “múltiples víctimas fatales” en el supermercado, que según medios locales estaba lleno de clientes haciendo compras para la cena de Acción de Gracias.
¿Qué sucedió en Chesapeake?
Pasadas las 22:00 horas los servicios de emergencia recibieron diversas llamadas alertando de un tiroteo al interior del Walmart de Sam’s Circle, luego de que, según la Policía, un empleado de la sucursal abrió fuego contra otros trabajadores en la sala de descanso del personal, en la parte trasera de la tienda, suicidándose tras el ataque.
Asimismo, al momento del incidente, varios testigos citados por medios estadounidenses dijeron que el tiroteo comenzó en la parte trasera de la tienda y que al menos cinco heridos habían sido trasladados al hospital, de los cuales cuatro fueron confirmados este miércoles por la Policía, aún hospitalizados y con estatus desconocido.
Mientras que hasta el momento se desconocen las causas del ataque, sin que se haya dado a conocer la identidad del agresor.”Creemos que se trata de un único tirador y ese único tirador falleció”, dijo Kosinski, quien añadió que no creía que la policía hubiera efectuado ningún disparo.
Mientras que, en las horas posteriores al tiroteo, imágenes de los noticieros mostraban una importante presencia policial en torno al supermercado, situado unos 240 kilómetros al sureste de la capital estadounidense, Washington.
Kosinski explicó que varios agentes e investigadores peinaban la superficie comercial y aseguraban la zona.
Lamentan el ataque
Por otra parte, este miércoles por la mañana, Walmart, el mayor minorista de Estados Unidos, emitió un comunicado manifestándose “conmocionado por este trágico suceso“.
“Rezamos por los afectados, la comunidad y nuestros colaboradores. Estamos trabajando estrechamente con las fuerzas de seguridad y nos centramos en apoyar a nuestros colaboradores”, añadió el gigante estadounidense de los supermercados.
La senadora del estado de Virginia, la demócrata Louise Lucas, se dijo “absolutamente desconsolada“, a lo que añadió en su publicación en Twitter “no descansaré hasta que no encontremos soluciones para terminar con esta epidemia de violencia con armas en nuestro país que se ha cobrado tantas vidas”.
“Trágicamente, nuestra comunidad está sufriendo otro incidente de violencia armada sin sentido justo cuando las familias se están reuniendo para el Día de Acción de Gracias“, tuiteó el congresista estadounidense Bobby Scott, de Virginia.
El segundo en menos de una semana
El sábado un hombre armado abrió fuego dentro de un club nocturno LGBTQ en Colorado Springs (oeste), matando a cinco personas e hiriendo al menos a 18.
El autor, identificado como un hombre de 22 años llamado Anderson Lee Aldrich, fue controlado por dos clientes. Podría ser procesado por asesinato y un posible crimen de odio.
Por ese tipo de delito se entiende en Estados Unidos un acto dirigido contra una persona por motivos de su identidad, como la raza, la religión, la nacionalidad, la orientación sexual o la discapacidad. Considerado como un delito federal con circunstancias agravantes, conlleva condenas más duras.
La violencia con armas de fuego se produce a un ritmo alarmante en Estados Unidos, donde han tenido lugar más de 600 tiroteos en lo que va de 2022, según Gun Violence Archive.