Tan sólo durante el primer semestre de 2023 los daños por catástrofes naturales suman ya 120 mil millones de dólares en todo el mundo, de acuerdo con la reaseguradora suiza Swiss Re.
Asimismo, la estimación publicada este miércoles es ligeramente menor a la registrada en los primeros seis meses de 2022, cuando se situó en 123 mil millones de dólares, mientras que los daños cubiertos por las aseguradoras sí registraron un aumento, sumando durante el primer semestre 50 mil mdd contra los 48 mdd del año pasado.
Mientras que la catástrofe más costosa fue el sismo de magnitud 7.8 que devastó Siria y Turquía a inicios de febrero, dejando más de 50 mil muertos, así como pérdidas económicas estimadas en 34 mil millones de dólares, según un cálculo preliminar del Banco Mundial.
Además, Swiss Re, que actúa como aseguradora de las aseguradoras, estima costos para estas instituciones en 5 mil 300 mdd, facturas que también subieron por las tormentas y los fenómenos meteorológicos que las acompañan, como el granizo, las fuertes lluvias, el viento y los cambios repentinos de temperatura, que supusieron casi 70% de los daños cubiertos, por 35 mil millones de dólares.
Y es que sólo en Estados Unidos se produjeron pérdidas aseguradas por valor de 34 mil millones de dólares, y las tormentas costaron a las aseguradoras 34 mil millones de dólares.
Diez tormentas causaron daños superiores a mil millones de dólares. El estado de Texas fue el más afectado.
Siguen registrándose récords climáticos
Por otro lado, mientras en España se prevén los días más cálidos de agosto en 73 años, Pekín, en China, ya registra sus mayores lluvias de los últimos 140 años, precipitaciones torrenciales que ya dejan 62 muertos al norte del país, triplicándose este miércoles el número de víctimas en una semana en la capital.
El tifón Doksuri, degradado a tormenta tras azotar la vecina Filipinas, arrasó parte de China la semana pasada con lluvias inusualmente intensas que causaron daños considerables.
El miércoles, el número de muertos por las tormentas se elevó al menos a 33, con 18 desaparecidos sólo en Pekín, mientras devastadoras tormentas azotaban también el noreste de China, cerca de Rusia y Corea del Norte.
El 1 de agosto, la cifra de víctimas mortales sólo en la capital se elevaba a 11.
“Quiero expresar mis profundas condolencias”, declaró el vicealcalde de Pekín, Xia Linmao, en una rueda de prensa, en la que también pidió un momento de silencio por las víctimas.
En tanto que diversas catástrofes naturales provocaron 147 muertos o desapreciados durante julio en el país asiático, de acuerdo con las autoridades, en un recuento sólo integra parcialmente a las víctimas del tifón Doksuri.