Candy Rogers Cold Case, una niña de 9 años que fue violada y asesinada hace 62, “recibió justicia” en este 2021, año en que la policía de Spokane, ciudad ubicada en la zona oriental de Washington, Estados Unidos, resolvió su caso.
“La determinación implacable, junto con el avance de la tecnología, ayudó a resolver uno de los crímenes más atroces e inquietantes de Spokane: la violación y el asesinato de una niña de 9 años, hace 62 años”.
Departamento de policía de Spokane
En marzo de 1959, la comunidad de Spokane se vio sacudida por la desaparición de una niña, Candice (Candy) Rogers, de 9 años. Durante la búsqueda de dieciséis días que siguió, la comunidad se manifestó con una gran cantidad de apoyo y participación. El optimismo y el activismo se convirtieron en tristeza y miedo cuando su cuerpo fue descubierto en un área boscosa en el noroeste del condado de Spokane.
“La habían violado y estrangulado hasta morir con una prenda de su propia ropa. La investigación resultante perseguiría a los miembros de la familia, los investigadores y la comunidad durante las próximas décadas”.
Departamento de policía de Spokane
Candy vendía mentas para fogatas y no volvió
En un informe difundido por el Departamento de la policía de Spokane se detalló que el 6 de marzo de 1959 Candy Rogers estaba vendiendo mentas para fogatas en el vecindario West Central de Spokane, donde vivía.
- Los miembros de la familia se preocuparon cuando ella no regresó a casa al caer la noche.
Esa angustia se intensificó cuando permaneció desaparecida hasta la noche y pronto todos los oficiales de policía disponibles, así como los ciudadanos y otras organizaciones se unieron a la búsqueda.
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“En un momento sin teléfonos celulares, GPS o cámaras de seguridad, los investigadores tenían muy poco equipo de apoyo para realizar la búsqueda e investigación”
Departamento de policía de Spokane
Cajas de mentas para fogatas que se cree que eran las que vendía Candy Rogers pronto se encontraron esparcidas a lo largo de Pettet Drive, aparentemente dirigiéndose hacia el norte, alejándose de West Central.
- Las mentas eran la única indicación, aunque no concluyente, de adónde se había ido la víctima.
En las horas y días posteriores a la desaparición, la comunidad se unió en su búsqueda. Hubo un tiempo en que se estableció un puesto de mando en lo que ahora es la intersección de Petite Dr. y el puente TJ Meenach.
- Aproximadamente mil 200 buscadores se reunieron y registraron el área en vano.
Varias entidades, incluido el Gobierno federal de Estados Unidos y la Fuerza Aérea, asistieron en la búsqueda. Se proporcionó una tripulación de helicóptero que proporcionó una vista de pájaro del área de búsqueda.
“Trágicamente, el día después de la desaparición, un helicóptero Sikorsky H-19 de la Fuerza Aérea de EU, involucrado en la búsqueda golpeó líneas eléctricas de alta tensión y se estrelló contra el río”
Departamento de policía de Spokane
El aviador Marlice D. Ray, el sargento William A. McDonnell y el teniente Kenneth G. Fauteck murieron en el accidente. Dos tripulantes sobrevivieron.
- Los esfuerzos de búsqueda continuaron en las semanas posteriores a la desaparición.
El 21 de marzo de 1959, dos aviadores de Fairchild salieron a cazar en un área boscosa cerca de Old Trails Rd, a unas siete millas de la casa de la menor. Descubrieron un par de zapatos de niña en el bosque.
A su regreso a la base, continuaron hablando sobre su descubrimiento y se preguntaron si los zapatos podrían estar relacionados con la búsqueda de Candy Rogers.
Informaron sus hallazgos, y cuando amaneció a la mañana siguiente, un grupo de búsqueda descendió sobre el área. Solo unos minutos después de la búsqueda, el cuerpo fue descubierto enterrado bajo una capa poco profunda de matorrales y agujas de pino.
Sin pruebas suficientes para un arresto
“En los días, semanas y meses que siguieron, los investigadores analizaron miles de pistas y pistas, pero ninguna condujo a un sospechoso viable. En 1959 no había ningún programa de delincuentes sexuales registrados, sin embargo, se contactó a personas con antecedentes penales similares. Se desarrollaron varios sospechosos, no obstante la policía no pudo obtener pruebas suficientes para realizar un arresto”.
Departamento de policía de Spokane
Los meses se convirtieron en años y los detectives frustrados, pero decidieron continuaron trabajando en el caso. A medida que pasaban décadas, el caso pasó de los detectives que se jubilaban a la próxima generación de investigadores.
En 1959, la tecnología y la capacidad de prueba forense eran prácticamente irreconocibles de las capacidades actuales. El ADN, aunque se reconoce como un concepto científico, no se utilizaría para resolver actos delictivos en las próximas décadas.
62 años después, exploraron el ADN
“Sin forma de conocer el futuro de las pruebas de rastreo y la sensibilidad de los procedimientos de prueba subsiguientes, la diligencia de los investigadores en 1959 conservó el ADN, el cual pudo extrapolarse 62 años después”.
Departamento de policía de Spokane
A principios de 2021, los investigadores del caso que trabajaban con expertos en laboratorios de criminalística se enteraron de un método de prueba de ADN de última generación ofrecido por un laboratorio en Texas.
Se proporcionó a ese laboratorio una muestra de semen recolectada de la ropa de Candy Rogers.
El espécimen se ingresó en una base de datos de genealogía, que redujo las posibles coincidencias a tres hermanos. Uno de los posibles partidos fue John Reigh Hoff.
- Hoff fue el único de los tres hermanos que tuvo descendencia.
“Los detectives tenían una nueva pista, pero quedaba trabajo por encontrar al asesino. Los investigadores contactaron a la hija de John Reigh Hoff, y al enterarse de la naturaleza de la investigación, dejó todo y se reunió con los detectives”
Departamento de policía de Spokane
La hija de Hoff envió una muestra de ADN que fue analizada. Los resultados mostraron que era 2.9 millones de veces más probable que el ADN de la hija de Hoff estuviera relacionado con la muestra recuperada que la población general.
“Los investigadores ahora tenían evidencia significativa que apuntaba a que Hoff era el culpable, pero se enfrentaban a una pregunta difícil; ¿Qué tan cierto era lo arrojado?”
Departamento de policía de Spokane
Hoff había fallecido y, por lo tanto, no habría juicio penal ni proceso contradictorio en el que cada parte presentara pruebas. Toda la información obtenida provendría de la investigación, y los detectives decidieron que tenían la obligación de estar lo más seguros posibles.
Con indicios de que John Reigh Hoff era el perpetrador, los investigadores solicitaron y se les concedió una orden judicial que les permitía exhumar el cuerpo de Hoff y recolectar muestras de ADN.
El resultado mostró una coincidencia entre John Reigh Hoff y la muestra de semen recolectada de Candy Rogers, con un umbral de probabilidad que indicaba que era 25 quintillones (18 ceros) de probabilidad de que la muestra proviniera del sospechoso que de una persona no relacionada elegida al azar de la lista general (población).
- La evidencia científica indicó de manera concluyente que la muestra de ADN recolectada de la evidencia era la de John Reigh Hoff.
John Reigh Hoff tenía 20 años cuando la violó y mató
Los hallazgos de ADN, junto con la evidencia que lo corrobora, permitieron a los investigadores determinar que John Reigh Hoff era responsable de la violación y el asesinato de Candy Rogers, de 9 años.
- John Reigh Hoff tenía 20 años en el momento del asesinato
- Creció en Spokane y residía a una milla del vecindario West Central, donde su víctima vivía
- Entró en el Ejército a los 17 años y estuvo estacionado en sitios de misiles que rodean Fairchild AFB
Candy no fue su última víctima
En 1961, dos años después del crimen, Hoff fue condenado por asalto en segundo grado con la intención de robar. En ese incidente, Hoff abordó a una mujer, le quitó por la fuerza la ropa, la ató con sus propias prendas y la estranguló antes de huir de la escena.
- La víctima sobrevivió y Hoff pasó seis meses en la cárcel por el ataque.
Así fueron los últimos años de vida del asesino
Con base en su condena, Hoff fue declarado desertor del Ejército y dado de baja. Fue empleado como vendedor de puerta a puerta y trabajó en un almacén de madera en el tiempo posterior a su expulsión del Ejército.
- En 1970, a la edad de 31 años, Hoff se suicidó.
El caso resonó en el departamento y la comunidad durante décadas. Cuando se le pidió que estimara cuántas horas se habían dedicado a investigar el caso de la menor, el sargento Zac Storment respondió “esto no se mide en horas, esto se mide en carreras“.
“Se necesitó la determinación de una comunidad, la evolución de la tecnología y la perseverancia de generaciones de detectives para finalmente resolver el misterio que rodea al horrible asesinato de Candy Rogers. 62 años después, finalmente hay una apariencia de cierre”.
Departamento de policía de Spokane.
