El izquierdista Luis Arce, delfín del exmandatario Evo Morales, ganó las elecciones presidenciales de Bolivia en una primera vuelta, al ganar más del 52% de los votos y con una ventaja de más de 20 puntos sobre su más cercano contrincante, el expresidente centrista Carlos Mesa, quien obtuvo el 31.5 las preferencias.
Los primeros datos fueron revelados por un conteo rápido, divulgado a través de una televisora privada del país.
Arce logró imponerse al expresidente Carlos Mesa, garantizando la vuelta al poder del Movimiento al Socialismo (MAS), que se vio afectado con la turbulenta renuncia de Evo Morales, quien se mantuvo por 14 años en el poder.
Morales tuvo que renunciar a la presidencia, luego de las elecciones de octubre de 2019, en medio de una crisis social y de denuncias de fraude en los comicios.
“El MAS ha ganado las elecciones ampliamente, incluyendo la Cámara de senadores y diputados. Bolivia tiene a Arce de presidente. Lucho será nuestro presidente, él devolverá a nuestra patria el camino del crecimiento económico”.
dijo Morales en una declaración desde Buenos Aires, donde se encuentra exiliado desde hace ocho meses.
Luis Arce, cuyo compañero de fórmula es el excanciller de Bolivia, David Choquehuanca, fue elegido como candidato por Morales desde su exilio en Argentina, donde participó activamente a través de las redes sociales en la campaña.
Luis Arce agradeció a los bolivianos su apoyo y su confianza para recuperar la democracia, y aseguró que juntos “retomaremos la estabilidad y la paz social”.
Por su parte, la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, utilizó su cuenta en la red social Twitter para felicitar al candidato izquierdista, por su triunfo en las elecciones.