La disputa en la segunda vuelta en la elección por la presidencia de Brasil, entre el derechista Jair Bolsonaro y Lula da Silva, que reúne a las fuerzas de izquierda, es reñida.
Desde Brasil, nuestro corresponsal, Patricio de la Barra, señala que este viernes 28 de octubre se vivió el último debate entre ambos candidatos a la presidencia, en el cual hubo prácticamente un empate.
“Hubo pocas propuestas en la primera parte; muchas acusaciones y más de lo mismo, de repetir las acusaciones de las cuales el pueblo brasileño está cansado, porque se debate siempre lo mismo”.
Patricio de la Barra.
En el debate, los temas que salieron a relucir fueron la corrupción, por parte de Lula da Silva, y la falta de vacunas contra el COVID-19, aunado a la falta de preocupación del presidente Bolsonaro por la pandemia que provocó la muerte de aproximadamente 600 mil personas en Brasil.
“Todo esto, realmente, no interesó mucho. En la última parte sí hubo propuestas de continuación. Por ejemplo, de mejorar la situación económica del país que ya está en vías de recuperación”.
Patricio de la Barra.
En el debate, Lula da Silva aseguró que el domingo en la noche va a presentar su programa económico, así como los ministros en el ramo y los demás que van a integrar su gabinete.
El ahora candidato, que ganó la primera vuelta, aseveró que va a revertir algunas privatizaciones que se realizaron durante el gobierno de Jair Bolsonaro.
Polarización en calles de Brasil
Al tornarse reñida la elección, en las calles se ha visto una polarización entre la ciudadanía. La gente, en un 5 o 6%, ha señalado que va a declinar votar, producto de, por ejemplo, lo que se vio en el debate de este viernes en el que no hubo propuestas.
“Los brasileños estaban esperando una propuesta más fuerte en el aspecto económico, en salud, educación, laboral, pero no hubo ninguna propuesta por parte de los dos candidatos. Si la intención era convencer a los 33 millones de personas que estuvieron ausentes en la primera vuelta y los seis millones que votaron ‘nulo’, creo que el resultado fue altamente negativo”.
Patricio de la Barra.
Las 577 mil urnas ya están distribuidas por todo Brasil para recibir los votos de más de 156 millones de personas, si concurren todos a votar en la segunda vuelta. Se espera que el ausentismo esté en torno al 20 o 30%.
- El dato: Este domingo 30 de octubre, los brasileños están llamados a las urnas para elegir a su nuevo presidente.