Luego de tres años al frente del gobierno británico, Boris Johnson renunció a su cargo como líder de la formación tras perder el apoyo de su Partido Conservador.
Desacreditado por los escándalos, el hombre que siempre se había negado a renunciar, fue empujado a la puerta de salida.
Es por ello que, a continuación te presentamos cinco puntos para entender el por qué Boris Johnson renunció.
1. Acusado por reacción ante pandemia de COVID
En abril de 2021, Boris Johnson fue criticado desde el inicio de pandemia por su gestión de la crisis, acusado por ejemplo de haber tardado en reaccionar. En abril de 2021, desmiente supuestas declaraciones en las cuales se oponía a un tercer confinamiento.
2. El “partygate”
A principios de diciembre del año pasado, se acumularon las revelaciones sobre varias fiestas ilegales organizadas en Downing Street durante los confinamientos. Los británicos denuncian un doble rasero, ya que Johnson acababa de anunciar un endurecimiento de las restricciones anti-covid.
El 12 de abril, Boris Johnson anuncia que recibió una multa de la policía por haber infringido la ley -algo nunca visto para un primer ministro en ejercicio- por participar en una fiesta de cumpleaños sorpresa en junio de 2020 en Downing Street. Sus explicaciones varían, pero ante el Parlamento asegura no haber violado las reglas.
3. Derrota electoral
En mayo de este año se le sumó otro problema a Boris Johnson, el escándalo hundió su popularidad y los británicos -que sufren por otra parte el aumento del costo de vida- se lo hacen saber en las urnas imponiéndole una derrota en las elecciones locales.
4. Voto de censura de su Partido Conservador
Boris Johnson sobrevive el 6 de junio a un voto de censura de los diputados de su Partido Conservador impulsado por un grupo de parlamentarios cansados por el “partygate”. Más del 40% de los diputados indican ya no tener confianza en el primer ministro, lo que refleja la amplitud del malestar.
6. Escándalos sexuales
Al “partygate” se suma una serie bochornosa de escándalos sexuales entre los conservadores, por ejemplo un diputado sospechado de violación detenido y luego liberado bajo fianza a mediados de mayo, y un exparlamentario condenado en mayo a 18 meses de prisión por agresión sexual contra un adolescente.
El 5 de julio, Boris Johnson pide disculpas y reconoce un “error” al haber nombrado en febrero en su gobierno a Chris Pincher, encargado de la disciplina parlamentaria de los diputados conservadores, cuando ya sabía de antemano de acusaciones de carácter sexual en su contra.