Contrario a la inocencia que suponen en el marco de la Pascua, esta semana autoridades belgas aseguraron un lote de conejos elaborados con MDMA, materia prima para las pastillas de éxtasis, en el Aeropuerto de Bruselas-Zaventem.
Según relató el oficial de aduanas Pol Meuleneire, quien se encargó de la incautación, los conejos de Pascua, tradicionalmente hechos con chocolate de Bélgica, estaban en su lugar fabricados a partir de un sólido de MDMA, conocida también como “droga del amor”.
Agregó que el lote de “chocolates” había sido empaquetado y enviado por correo desde Bélgica a un comprador en Hong Kong, pero interceptados por la aduana belga en la terminal de carga del aeropuerto de la capital nacional.
En la entrevista, Meuleneire presionó el escáner de mano que usa espectroscopía para identificar sustancias por su huella química contra uno de los supuestos conejo de chocolate y tomó una lectura. La pantalla parpadeó en verde y el análisis fue claro: “Precaución: MDMA (éxtasis)”.
“¿Ves? Es MDMA puro”, dijo el agente de 61 años, quien agregó que “así que aquí tenemos, veamos… uno o dos kilogramos de esto. Con un kilogramo se hacen seis mil pastillas de éxtasis”.
Mientras Meuleneire hablaba con periodistas durante una visita a las oficinas aduanales, llegaron varias entregas ilícitas más de paquetes recibidos la semana pasada.
Tráfico por correo, cada vez más común
Conocida como la puerta de entrada a Europa para la cocaína latinoamericana, Bélgica se ha convertido en un portal para las drogas sintéticas por correo, fabricadas en Europa y enviadas a todo el mundo.
Meuleneire, que se jubilará en unos meses tras 43 años en el servicio de aduanas de Bélgica, apunta que cuando comenzó su carrera le emocionaba encontrar 10 gramos de cannabis en una carta.
Ahora, su espacio de trabajo en un bloque de oficinas en la zona de carga del aeropuerto de Bruselas está repleto de paquetes sospechosos, bolsas y frascos de píldoras y polvos ilegales.
“En 2022 llegamos a casi seis toneladas de drogas incautadas aquí en el aeropuerto […] sale hacia todo el mundo. Hoy en día, las personas pueden hacer pedidos en línea en la ‘internet profunda’ con unos pocos ‘clics’ y pueden decidir lo que quieren y recibirlo en sus hogares”
Florence Angelici / vocera del servicio financiero federal SPF
Cada vez más “creativos”
Una lonchera con la marca Peppa Pig, destinada a Nueva Zelanda, parecía inocente, pero el empaque en el que se transportaba se veía demasiado pesado para ser solamente cartón y plástico.
Dentro, con separadores de plástico protector, había ketamina, un anestésico mal utilizado como droga recreativa y una de las exportaciones ilegales de más rápido crecimiento a través del depósito postal del aeropuerto.
Igualmente se descubrió que el juego de química de un juguete infantil para estudiar el crecimiento de los cristales contenía una bolsa envuelta en plástico que contenía metanfetamina, un estimulante sintético ilegal y adictivo.
También hay cocaína, colocada en paquetes de plástico entre capas dobles de embalaje de cartón, lo que hace que el paquete sea sospechosamente pesado para un experimentado oficial de aduanas.
Amberes, en Bélgica, es el principal puerto de entrada a Europa para la cocaína latinoamericana, pero parte de ella se reexporta simplemente por correo a países como Australia, donde alcanza un precio de venta más alto.
Esos grupos latinoamericanos exportan narcóticos de origen vegetal, como la cocaína, a Europa, y a su vez importan drogas sintéticas como la metanfetamina desde laboratorios europeos.
Pero la mayoría de las exportaciones por correo son de drogas sintéticas fabricadas en laboratorios clandestinos y plantas farmacéuticas encubiertas en Bélgica y, especialmente, según funcionarios belgas, en los Países Bajos.
La ketamina, la MDMA y la metanfetamina se disfrazan en objetos cotidianos o se envasan en frascos marcados como suplementos vitamínicos legales y luego se envían por correo desde oficinas postales ordinarias de Bélgica, Francia y Alemania.
“Estamos hablando principalmente del uso del servicio postal belga, que podría atraer menos la atención de los funcionarios de aduanas en los países de llegada que el servicio holandés”
Florence Angelici / vocera del servicio financiero federal SPF
En el aeropuerto, una plataforma computarizada selecciona los paquetes en función de las características sospechosas conocidas y los funcionarios de aduanas se ponen a trabajar escaneándolos y, en algunos casos, abriéndolos.
La oficina de Meuleneire está decorada con estos “recuerdos”, entre los que figuran retratos de Jesucristo con marcos llenos de droga, osos de peluche repletos de pastillas y tubos de cobre con tranquilizantes veterinarios.
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