Hoy en día, los piercings en los pezones se han vuelto muy populares, pero ¿sabías que también estuvieron de moda en la época victoriana (1837-1901)? Aunque no lo creas, hubo una temporada en la que las perforaciones en esta área tan íntima del cuerpo tuvieron gran auge.
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La moda los piercings en los pezones en la época victoriana
Los piercings en los pezones eran una práctica relativamente común en la época victoriana, especialmente entre las mujeres de la clase alta; se sabe que las mujeres del siglo XIX utilizaban las perforaciones en esta área como una forma de realzar su figura y aumentar el tamaño en esta parte del cuerpo.
También se pensaba que eran afrodisíacos y podían aumentar el placer sexual; sin embargo, estaba asociado con la prostitución y la promiscuidad. Es por esta razón que llegó un punto en que las mujeres que llevaban arillos metálicos a menudo eran objeto de estigmatización y discriminación.
¿Te vas a perforar esta parte del cuerpo? Ahí te van unas recomendaciones
Antes del “gran día”:
- Investiga a fondo sobre el procedimiento, los cuidados necesarios y los posibles riesgos antes de tomar una decisión
- Elige un perforador profesional, con experiencia, con permisos y que utilice equipo y joyas estériles
- Prepárate para el dolor
- Sigue las instrucciones de cuidado para evitar infecciones y complicaciones
Después de perforarte:
- Lava la zona con agua salada o una solución salina estéril dos veces al día
- Evita tocar las joyas
- Evita el contacto con productos químicos
- Usa ropa cómoda
- Si experimentas dolor, enrojecimiento, hinchazón o secreción, consulta a un médico
Toma en cuenta que los piercings en los pezones pueden tardar hasta seis meses en curarse por completo, así que durante el proceso de sanación deberás de tener mucho cuidado.