Por qué el bacalao se come en Navidad
En unotv.com te contaremos la razón por la que se come bacalao en Navidad, mira los detalles.
El bacalao se ha convertido en un alimento tradicional en la Navidad por distintas razones culturales, históricas y prácticas.
En muchos países de tradición cristiana, la Iglesia Católica promueve la abstinencia de carne roja en ciertas fechas importantes como la Cuaresma y la Navidad. El pescado, especialmente el bacalao seco y salado, se convierte en una alternativa común.
El bacalao salado era fácil de conservar antes de la invención de los refrigeradores, lo que lo hacía accesible para muchas familias, incluso en zonas alejadas del mar. Este método de conservación permitiría almacenar el bacalao durante meses, ideal para consumirlo.
En muchos países como España, México, Portugal e Italia, el bacalao se integró a las tradiciones culinarias navideñas, platillos como el bacalao a la vizcaína y el bacalhau à Brás en Portugal.
El bacalao es un platillo que requiere preparación y tiempo, simbolizando el esfuerzo familiar para crear un banquete especial, promoviendo la convivencia y la unión en estas fechas.
Las rutas comerciales de Europa y América ayudaron a popularizar el bacalao en el mundo, integrándose a festividades locales con diferentes preparaciones adaptadas a cada región.
Según el Gobierno de México, el bacalao llegó a nuestro territorio aguas frías durante la época de la Conquista junto a españoles y fue hasta el Virreinato que llegó el famoso bacalao a la vizcaína, platillo que por cuestiones religiosas era popular para vigilia.
En el país, durante el Virreinato, el bacalao a la vizcaína fue considerado un “platillo de fiesta” pues era preparado para Cuaresma y Navidad, aunque actualmente también es muy común en la cena de Año Nuevo.
Origen del bacalao a la vizcaína
El bacalao a la vizcaina es un plato de origen vasco cuyas raíces se asocian a la cocina tradicional de Vizcaya, una provincia de España.
Receta bacalao a la vizcaína
La receta clásica incluye ingredientes como el tomate, pimiento y aceite de oliva, que ayudan a complementar a la perfección el bacalao. Sin embargo, como la mayoría de los platillos, ha evolucionado a lo largo del tiempo.
A su llegada a México, también se transformó, añadiendo elementos como el perejil, las aceitunas, alcaparras y el toque picante de los chiles güeros curtidos.
Ingredientes
1 kg de bacalao salado
- 4 jitomates grandes
- 6 chiles guajillo
- 1/2 taza de aceite de oliva
- 2 cebollas grandes
- 4 dientes de ajo
- 1/2 taza de aceitunas verdes
- 1/4 taza de alcaparras
- 1/2 taza de pasas
- 1 taza de puré de tomate
- 2 hojas de laurel
- Sal y pimienta al gusto
Preparación
Desalar el bacalao
- Remoja el bacalao en agua fría durante 24 a 48 horas, cambiando el agua cada 6-8 horas.
- Desmenuza el bacalao en trozos medianos, asegurándote de retirar las espinas y piel.
Preparar la salsa vizcaína
- Asa los jitomates, pela y licúalos junto con los chiles guajillo remojados para formar una salsa. Cuela y reserva.
- En una cazuela grande, calienta el aceite de oliva y sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes.
- Agrega la salsa de jitomate y chile, el puré de tomate, las hojas de laurel, sal y pimienta. Cocina a fuego medio por 10 minutos.
Integra los ingredientes
- Incorpora el bacalao desmenuzado a la cazuela con la salsa.
- Añade las aceitunas, alcaparras, pasas y mezcla bien.
- Cocina a fuego lento durante 20-30 minutos, permitiendo que todos los sabores se integren.