Museo de la comida asquerosa, está en Alemania y el recorrido incluye una bolsa para vomitar

| 14:34 | Aldo Flores | Uno TV
Museo de la comida asquerosa
Así es el Museo de la comida asquerosa en Alemania. Foto: AFP

Conoce el museo de la comida asquerosa en Alemania, dicen que el recorrido incluye una bolsa para vomitar y en Unotv.com te contaremos los detalles. 

La gastronomía es muy amplia y tiene tantas variantes a nivel mundial que lo que para algunos países puede ser un manjar, para otros suene “asqueroso” o poco apetecible, sin embargo hay un lugar que lleva esto al extremo. 

Se trata del Museo de la Comida Asquerosa (Disgusting Food Museum) y se encuentra en Berlín, siendo un lugar más pequeño que el original que está en Malmo, Suecia.

Aunque puedas estar imaginando que tu comida menos favorita sea digna de entrar a este museo, la verdad es que van más allá pues las combinaciones de platillos son algo poco visto y puede que probado. 

Por lo mismo y ante personas sensibles, al inicio del recorrido te regalan una bolsa de papel para poder vomitar, de la que de acuerdo con el medio El Español, desde su apertura en 2021, al menos 50 personas han usado dicha bolsa. 

De acuerdo con el responsable de la muestra, Steffen Beyer, en la colección de comidas desagradables están muchas culturas del mundo, quienes consideran estos alimentos como medicinales, espirituales o afrodisiacos. 

En la entrada del museo se puede leer el mensaje: “El asco es contextual. El asco es cultural. Nos gustan los alimentos con los que hemos crecido, pero las ideas sobre el asco pueden cambiar con el tiempo”.

Algo de lo que puedes encontrar son órganos cocidos o fritos y en algunos casos réplicas de partes de animales, como pene o testículos de toro, muy populares en China.

En un video de su cuenta de Instagram se puede ver cómo los asistentes pueden probar algunos alimentos, en este caso una mujer prueba un escarabajo seco, mientras que la cara de asco no puede faltar. 

En el museo hay distintos espacios, uno de ellos es luminoso que tiene pinta de ser un laboratorio, en el que está un alimento llamado Cazu Marzu, que es un queso Pecorino de Cerdeña con un hueco en el centro lleno de gusanos vivos. 

Lo que las personas buscan al visitar el museo es impactarse, pero los que están a cargo del lugar dicen que se trata de “aprender algo sobre el asco individual y de cómo funciona en otras culturas”, así mismo dejando en claro “cómo sientes asco o cuándo algo te da asco”. 

Algo importante para conocer el museo es tener los principales sentidos ya que a lo largo de la expo se proyectan videos para ver cómo se preparan algunos alimentos, desde el jugo de ojo de oveja, hasta que en Vietnam es sacado el corazón de una cobra para servirlo en una copa con vodka y la sangre que derrama en el proceso. 

Por lo mismo es importante ir preparado para oler pues tu nariz descubrirá olores de queso o pescado, como el tiburón más oloroso del mundo, insectos fritos, cremas para untar y bebidas como esperam de caballo y orina de vaca. 

Los expertos del museo señalan que la función evolutiva del asco ayuda a evitar enfermedades y comida en mal estado, sin embargo por muy universal que sea esta sensación, el estímulo que provoca es individual.

“Las ideas sobre el asco cambian con el tiempo. Hace 200 años, la langosta era tan indeseable que solo se servía a prisioneros y esclavos. Hoy en día la langosta es un lujo delicioso”, 

se puede leer en la exposición.