La depresión es un padecimiento que muchas personas padecen y en ocasiones podemos herir sus sentimientos con palabras; por ello, hoy te diremos hasta 7 frases que no debes decir a alguien con depresión, principalmente cuando sabes que la sufre, con el objetivo de que no tomes a la ligera lo que le vayas a decir. Y para esto, en UnoTV.com Maggie Hegyi nos platica sobre este interesante tema.
¿Qué es la depresión?
La depresión es una enfermedad que se caracteriza por una tristeza persistente y la pérdida de interés en actividades que normalmente se disfrutan. Sin embargo, aunque la depresión es un trastorno anímico y mental, también puede causar síntomas físicos que afectan al cuerpo. A la expresión de estos síntomas corporales provocados por un fenómeno mental se le conoce como somatización y ocurre, según los expertos, cuando se reprimen y guardan las emociones
También te podría interesar: [Diferencias entre tristeza y depresión: ¿cómo identificarlas?]
Frases que no debes decir a alguien con depresión
Cuando alguien que te importa está experimentando esta enfermedad, deseas ayudarle. Pero las personas con buenas intenciones a menudo dicen cosas que no son útiles y debemos tener muy claro que dicho padecimiento es un trastorno grave. Aquí algunas frases que no debes decir a alguien con depresión:
“No parece que tengas una depresión”
En muchas ocasiones nos gana el prejuicio de cómo debería ser la imagen ideal de una persona deprimida: triste, hecha polvo, sin arreglar, sin sonreír, llorando constantemente. La depresión tiene múltiples caras.
“No entiendo por qué estás tan triste, ¡no tienes motivos!”
Este tipo de frases pueden hacer mucho daño, puesto que restan importancia o minimizan el dolor que sufre la otra persona. Invalidan, por lo tanto, los sentimientos y el sufrimiento de la persona a la que intentamos animar.
Te podría interesar: [La depresión también es una enfermedad laboral: ¿qué tanto afecta?]
“No valoras la suerte que tienes en la vida, por eso estás así”
Hay personas con mucho dinero, éxito, belleza, etc. y viven con un vacío interno tremendamente doloroso. Este tipo de comentarios puede provocar que la persona que lo reciba se sienta tremendamente culpable, por no sentirse capaz de superar su enfermedad.
“¡Anímate! Si pones de tu parte, seguro que te encuentras mejor”
Con frases de este estilo estamos dando a entender que una persona que padece depresión está enferma porque no se esfuerza lo suficiente para encontrarse mejor.
“Todo está en tu cabeza: piensa que hay enfermedades y problemas mucho peores”
Aquí solo minimizas su problemática, negando, en cierta medida, el sufrimiento que pueda padecer.
“¿Estás haciendo deporte y comiendo bien?”
Comer bien, salir a pasear, ir al cine, ir a un concierto; ese tipo de actividades beneficiosas para nuestro estado de ánimo y nuestra salud, no siempre son fáciles de asumir para una persona con depresión. De hecho, pueden suponer un auténtico suplicio lleno de angustia para ellos. En muchas ocasiones, una persona con un trastorno depresivo grave no es capaz ni de salir de la cama o meterse en la ducha. Por ello, debemos evitar aleccionar a alguien con depresión sobre “buenos hábitos” que debería seguir para mejorar.
“Eres fuerte, así que lo superarás”
Salir de una depresión no es cuestión de fortaleza ni debilidad. De hecho, estos conceptos suelen hacer mucho daño, porque invalidan los procesos emocionales. Todos tenemos fuerza y debilidad, es lo que nos hace humanos. Y no podemos forzarnos ni forzar a nadie a sentirse de una determinada forma, cuando su fuero interno le está indicando algo totalmente distinto. La depresión puede superarse, por supuesto. Pero gracias al tratamiento adecuado en mano de especialistas.
¿Cómo hablarle a una persona con depresión?
Ahora que conoces algunas frases que no debes decir a alguien con depresión, te contamos que las claves para dirigirnos a una persona con esta enfermedad y para mostrarle tu apoyo parte de unos pilares muy importantes: compasión, empatía y capacidad de escucha.
Nunca debemos restarle importancia ni invalidar sus sentimientos ni su proceso. Hacerle entender a esa persona que estamos a su lado si nos necesita, es el mensaje más valioso y eficaz que podemos trasmitirle: sin agobiar, sin juzgar, sin presionar. Y si te equivocas, pide perdón.