Ingresar a estas grutas, ubicadas en Yucatán, es como descender al inframundo maya. Aktun Usil, que en lengua maya se traduce como “lugar donde se ve el soplido de la pintura”, conserva aún impresionantes pinturas rupestres, mismas que los pobladores atesoran y resguardan.
El sitio fue descubierto por los habitantes hace ya varias décadas, pero el complejo de grutas aún sigue siendo explorado por antropólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
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Los guías explican el significado de las figuras plasmadas.
“Las interpretaciones o la interpretación sobre ese rostro es que es un Nahual, un espíritu, el guardián de este lugar; entonces la representación de la gruta es que representa al vientre o al cuerpo materno y la cabeza de esta figura y las manos del cuerpo serían las que están ahí en pinturas negativas. Las manos se plasmaron con pintura positiva y también negativa quizá para no perder el contexto y hay un numeral que es el 14, posteriormente el número 3 repetido y una especie de rectángulo que tiene el punto de una pintura negra que se asocia con sequías intensas que enfrentaron nuestros ancestros los mayas”.
Víctor Chim / Guía de turistas.
Este sitio, en el que se realizan recorridos turísticos, se encuentra en el municipio de Maxcanú, a unos 65 kilómetros de Mérida.
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Especialistas han considerado que el sitio era utilizado no sólo como refugio, sino como un lugar sagrado, un templo donde se realizaban ofrendas, ceremonias y rituales.
“Hay símbolos de mono que son petrograbados, el mono en la iconografía maya se relaciona con la música y la danza, como el patrono del juego de pelota, la escritura y la arquitectura y hay figuras, cruces relacionadas con Venus, hay un mono sentado y el rostro de chacal y entonces todo eso se ha descubierto y sin duda alguna es un lugar sagrado”.
Víctor Chim / Guía de turistas.
Se estima que los glifos que adornan los techos de la caverna, datarían del 750 al 1050 D.C.
Lourdes Canché es habitante de Maxcanú y llama a seguir protegiendo la zona.
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“Que se sientan orgullosos de ser de origen maya porque muchos se avergüenzan, pero hay que protegerlo, que lo cuiden para futuras generaciones, para que otros lo puedan ver y quede para la eternidad”, señala Lourdes.
Este es un santuario subterráneo virgen para conectar con el inframundo maya.