El fenómeno arqueoastronómico conocido como “Kukulcán Lunar”, pudo observarse desde la madrugada de este miércoles en la zona arqueológica de Chichén Itzá, un fenómeno de que se descubrió hace más de 30 años y que se observa días después de equinoccio de primavera, cuando la “serpiente lunar”, el Dios Kukulcán de los mayas, desciende sobre las escalinatas del Castillo de Chichén Itzá a la luz de la luna.
La sombra se pudo observar poco después de las 4:00 de la mañana y fue el custodio José Antonio Keb Cetina quien pudo observar el fenómeno cuando la luz lunar comenzó a iluminar el lado oeste del Castillo de Kukulcán, proyectándose poco a poco sobre los siete triángulos para dar el efecto de serpiente lunar en descenso.
“La simetría del Castillo con la Luna llena de la primavera es perfecta y nos deja ver estos fenómenos sobre la pirámide”, informa José Antonio Keb Cetina, custodio y experto de Chichén Itzá.
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El descenso fue rápido que ni los perritos guardianes lo percibieron, señaló Keb Cetina, ya que “Cachimba” y “Osita” se durmiendo durante el descenso de la deidad maya.
El fenómeno arqueoastronómico fue descubierto en 1993 por el arqueólogo Víctor Segovia Pinto y el matemático Eddie Salazar Gamboa.
¿“Kukulcán” significa serpiente o dios?
La palabra proviene del maya antiguo Kꞌuꞌukꞌul Kaan (‘serpiente emplumada’); se trata de uno de los dioses mayas. Se asemeja a la Serpiente Emplumada, deidad venerada en Mesoamérica y cuyo culto es uno de los más significativos.
Serpiente Emplumada es la traducción del nombre maya yucateco Kuukul Kaan.
Según algunos investigadores, este dios es el mismo Quetzalcóatl (del náhuatl: Ketsalkoatl, “serpiente emplumada”) de los aztecas y tiene su origen en la cultura tolteca, mientras que según otros, tiene su origen en la cultura olmeca. En todo caso, tiene un origen mucho más antiguo que los itzáes y los mayas de la península de Yucatán.