Jesús llora agradecido por el televisor que le regaló su maestra, quien consigue televisiones donados para que sus alumnos de una escuela primaria en Veracruz puedan seguir las clases a distancia debido a la pandemia.
“Estoy muy agradecido porque la maestra ha hecho muchos esfuerzos por mí, me enseña muchas cosas”, dice Jesús Castellanos, de 8 años, antes de romper en llanto.
Con un abrazo largo y amoroso, la profesora Eliana Montiel consuela al pequeño, a quien una reciente inundación le estropeó la tele y los útiles escolares.
Ahora es uno de los beneficiarios de las televisiones que Montiel recibe en donación para que sus alumnos de tercer grado, alejados de las aulas por la emergencia sanitaria y sin acceso a este medio, sigan estudiando.
La maestra, de 29 años, lanzó la iniciativa en Facebook y obtuvo respuesta casi de inmediato. Varios usuarios ofrecieron televisores usados, tanto analógicos como digitales, para apoyar a los menores de bajos recursos.
“Sentí una gran preocupación (…) al saber que muchos alumnos no tendrían dónde ver sus clases”, cuenta Montiel. Los padres de familia, muchos de ellos están desempleados por la epidemia, y no tienen dinero para comprar o reponer sus aparatos dañados.
La joven profesora recorre en su auto los barrios del municipio de Veracruz para recoger los electrónicos en los que sus estudiantes seguirán el ciclo que arrancó el 24 de agosto con clases por televisión para 30 millones de escolares.
- “Sentí una gran responsabilidad, empatía con esas personas que quizá no tienen los medios”, subraya la maestra.
Las clases del programa “Aprende en casa II” se imparten por señal abierta y servicios de cable, aunque los profesores también organiza clases por videollamada.