Como la realidad siempre supera la ficción, esta vez te contaremos la gran historia del señor Juan Manuel Vidales Montero, originario del municipio de Huimanguillo, en Tabasco, quien, tras haber rifado su camioneta para cubrir los gastos de una operación, la recibió como regalo de parte del mismo ganador.
Rifa su camioneta para pagar su operación (cáncer de colon) se la saca su amigo y se la regala.
— Koky Rueda (@RuedaKoky) December 26, 2021
Sucedió en Huimanguillo Tabasco.#HeroesSinCapa@spidermanchoco @inundeishon @ChicoCheVive @soy_chokito @El_Chokisimo pic.twitter.com/qLZlBUP23x
En un conmovedor video difundido en redes sociales, el señor Vidales Montero explica acerca de la rifa y agradece a todas las personas que participaron en la misma, así como a quienes lo han apoyado en este momento difícil de su enfermedad. Con mucho ánimo, y para dar fe de la veracidad de la rifa, entrega en video los papeles de la camioneta blanca pick-up Chevrolet modelo 2000, que se ve atrás, y que fue para el ganador de acuerdo con las últimas cifras de la Lotería Nacional.
“Me siento muy contento y muy alegre de estar aquí con ustedes todavía, que Dios los bendiga a todos y un fuerte abrazo”, expresó con la mejor actitud el señor Juan Manuel, quien, además, entregó dos premios más de 20 y 10 mil pesos para los ganadores del segundo y tercer lugar.
- Sin embargo, la vida le tenía preparada una sorpresa mayúscula, porque el ganador, un joven de nombre Marco Polo Rodríguez, le regaló de nuevo su vehículo.
Se puede escuchar cómo dice uno de los sujetos en el video al chico que recibió los papeles “dígale”, para posteriormente exclamar “le pusimos un moño como un regalo”, y acto seguido, el joven le entrega de nuevo los papeles de la camioneta a su dueño original, que rompe en llanto ante la acción del joven, así, el ganador devolvía a su dueño original el vehículo que había sido rifado para pagar la cuenta de su operación.
Las redes sociales no sólo nos cuentan las historias malas, también las hay de este tipo, donde la bondad y empatía de la gente superan cualquier película de ficción.
