En Querétaro, el colectivo Siguienteescena colocó seis pianos en diferentes puntos del Centro Histórico para que la gente disfrute de la música e, incluso, los toque o aprenda a hacerlo.
“El piano se destapa a las 10:00 de la mañana y se cubre a las 10:00 de la noche, y durante todo el día hay dos turnos de alumnos del conservatorio en cada uno de los pianos, ellos están, además de tocando el piano, practicando y también enseñando a la gente que quiera acercarse a aprender a tocar el piano”, aseguró René Venegas, director de Siguienteescena.
Pianos causan sorpresa en Querétaro
La medida sorprendió a locales y visitantes, pues resultó algo poco común pero agradable.
“Me parece una idea espectacular porque en cuanto a las artes y la música, el piano siempre es un instrumento que se considera muy de élite, y no es accesible para muchas personas; entonces que haya pianos disponibles en la calle para toda la gente que quiera tener un primer contacto, segundo, tercero o si ya tienes experiencia, acercarte y hacer algo y compartirlo con toda la comunidad”, dijo Héctor Selín Córdova, habitante de Querétaro.
El proyecto se denomina Insitu Piano y replica a otro que nació en Londres en 2008, que ya ha llegado a 70 ciudades del mundo.
“La gente se acerca, la gente voltea, yo he interactuado mucho con la gente porque a veces toco una melodía que conocen y la cantan, a veces toca otro músico y tocamos juntos, entonces, siento, es lo bonito de este proyecto, hacer música con las personas, alegrarles el día cuando van caminando por aquí”, comentó Diego Armando Vargas Valencia, estudiante del Conservatorio José Guadalupe Velázquez.
Incluso, las autoridades de Querétaro han respaldado la medida, pues integra a los ciudadanos a la cultura.
“El arte siempre va a ser un contrapeso a lo fuerte que está la situación en el mundo. Se han involucrado con pianistas que normalmente están en una sala de conciertos”, mencionó María Teresa García, secretaría de Cultura del municipio.
- Durante los últimos días de abril, estos seis pianos continuarán conquistando el espacio acústico del Centro de Querétaro, invitando a escuchar, aprender, tocar o simplemente admirar a cualquiera que pase, pues cada piano está intervenido por artistas plásticos que plasmaron, en cada instrumento, una escena distinta.